Rue20 Español/El Aaiún
La Agencia Federal de Pesca de Rusia (Rosrybolovstvo) ha emitido, esta semana, un decreto que distribuye la cuota de pesca de la flota rusa en la parte atlántica del espacio marítimo marroquí.
Esta medida permite a las empresas rusas que operan en las costas marroquíes capturar 10.000 toneladas de peces de superficie, incluyendo sardinas.
La cooperación en materia de pesca entre Rabat y Moscú está enmarcada por el acuerdo firmado en Rabat el 14 de septiembre de 2020 y en Moscú el 14 de octubre del mismo año.
Ilya Shestakov, jefe de la agencia, declaró a los medios de comunicación rusos que los datos preliminares obtenidos durante la misión enviada a África indican que los barcos rusos aumentarán su cuota de pesca en las costas marroquíes durante el próximo año 2025.
«Estamos analizando los datos que estamos recibiendo ahora. Creemos que las poblaciones de peces en Marruecos están en buen estado y creo que los operadores de barcos rusos que pescan en las costas de Marruecos pueden aumentar su volumen de producción para el próximo año», añadió.
Marruecos y Rusia han prorrogado su cooperación en el sector pesquero hasta finales de 2024, según informaron medios rusos.
Los dos países están vinculados por un acuerdo firmado en 2020 que cubre un período de cuatro años, de 2020 a 2024. Este acuerdo, firmado en Rabat el 14 de septiembre de 2020 y en Moscú el 14 de octubre de 2020, es el octavo entre ambos países en materia de pesca marítima desde el primer acuerdo firmado en 1992.
El acuerdo, que tiene una duración de cuatro años, establece el marco legal que permite a una flota de diez barcos rusos pescar pequeños peces de superficie en aguas marroquíes más allá de las 15 millas náuticas.
Moscú y Rabat están negociando la prórroga del acuerdo de pesca para los próximos años. Rusia está siguiendo de cerca la evolución de las relaciones pesqueras entre Marruecos y la Unión Europea, tras la reciente decisión del Tribunal de Justicia de la UE.
Por su parte, Marruecos está adoptando una estrategia internacional que apuesta por la diversificación de socios y la apertura a la cooperación con entidades que respeten las especificidades y los intereses estratégicos del reino bajo el lema «ganar-ganar».