Rue20 Español/Rabat
La embajadora de Marruecos ante la Santa Sede y la Orden Soberana Militar de Malta, Rajae Naji Mekkaoui, destacó, el miércoles en Roma, el enfoque marroquí en materia de política migratoria, bajo el liderazgo de SM el Rey Mohammed VI.
“Marruecos está bien posicionado en la escena internacional en materia de política migratoria, gracias a sus iniciativas y compromisos, por las Altas Orientaciones de Su Majestad el Rey”, subrayó Naji Mekkaoui, quien se pronunciaba en un encuentro sobre “la migración y la política migratoria del Reino de Marruecos”, organizado por la institución Caritas Politica.
La diplomática señaló que el Reino es un “socio fiable” en el ámbito de la cooperación en la gestión de los flujos migratorios, la lucha contra la migración ilegal y la trata de personas, y es un actor “muy activo” en los procesos e iniciativas emprendidos sobre estas cuestiones a nivel bilateral, regional, continental e internacional.
Bajo el liderazgo de Su Majestad el Rey, Marruecos ha adoptado una estrategia nacional “global, solidaria, humanista y pionera” en materia de inmigración y asilo, que incluye diversos aspectos como el respeto de los derechos humanos y la conformidad con el derecho internacional, añadió Naji Mekkaoui.
La aplicación de la Estrategia Nacional de Inmigración y Asilo (SNIA), prosiguió, ha permitido poner en marcha dos operaciones excepcionales de integración de migrantes que residían irregularmente en Marruecos, durante las cuales se regularizó la situación de unos 60.000 migrantes, procedentes principalmente de países del África subsahariana.
Durante el año anterior, Marruecos regularizó la situación de más de 2.300 refugiados, precisó la diplomática, antes de recordar que el Reino es uno de los primeros países en haber ratificado la Convención de Ginebra de 1951 sobre los refugiados, y el segundo en el mundo en ratificar la Convención sobre la protección de los derechos de todos los trabajadores migrantes y de sus familiares.
Este enfoque marroquí, que también tiene como objetivo aprovechar los beneficios de la migración como catalizador para el desarrollo, garantizando al mismo tiempo la protección necesaria para los migrantes en situación de vulnerabilidad, cuenta con una batería de programas de acciones sectoriales que abarcan la educación, la formación, la salud, la vivienda, la protección social, el empleo, la lucha contra la trata de personas, la cooperación internacional y la gobernanza”, explicó Naji Mekkaoui.
“Por lo tanto, no fue nada fortuito que Marruecos acogiera, en diciembre de 2018 en Marrakech, el Foro Mundial sobre Migración y Desarrollo que condujo a la adopción del Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular”, señaló la diplomática, precisando que se trataba de la “coronación de los esfuerzos y los intereses especiales que el Reino concede a África”.
“A nivel africano, la atención del Reino de Marruecos refleja el fuerte compromiso y el liderazgo de Su Majestad el Rey Mohammed VI en África sobre el tema de la migración, a través de varias iniciativas, como la Agenda Africana sobre Migración, que plantea una nueva visión en la gestión de la migración africana”, continuó Naji Mekkaoui.
A nivel europeo, la cooperación multidimensional con los países europeos se basa en un enfoque global, fundado en el respeto mutuo, la solidaridad y la búsqueda de soluciones duraderas, añadió para señalar que a nivel euroafricano y euromediterráneo, Marruecos contribuye activamente a facilitar las dinámicas de diálogo sobre la cuestión migratoria en el marco del Proceso de Rabat sobre Migración y Desarrollo, lanzado en 2006.
Naji Mekkaoui subrayó, asimismo, que “la presión de la migración irregular se ha visto exacerbada por la explotación cínica de las políticas de protección y de acogida por redes criminales de tráfico de migrantes, en particular ante los jóvenes, que han desviado sus nobles objetivos en su propio beneficio”.
Marruecos no ha dejado de insistir en la importancia de una gobernanza “racional y humana” de las cuestiones migratorias, a nivel regional y multilateral, en línea con los objetivos del Pacto de Marrakech, concluyó la embajadora.
En este encuentro participaron, también, el cardenal Joao Braz de Aviz y el embajador de México ante la Santa Sede, Alberto Medardo Barranco Chavarría.