Rue20 Español/Tánger
En medio de una agitada campaña electoral en Argelia, Marruecos nunca está lejos de los discursos o las noticias. Calificado como enemigo desde la llegada al poder del presidente designado Abdelmadjid Tebboune, el Reino es a menudo atacado de diferentes maneras.
La última de ellas fue el anuncio de la detención de «espías marroquíes», la anterior fue la de no izar la bandera marroquí durante una competición de fútbol femenino.
El domingo, las autoridades argelinas anunciaron la detención de tres ciudadanos marroquíes por espionaje. Estos marroquíes formaban parte, al parecer, de una red de 6 personas, entre las que se encontraban 3 argelinos que también serían espías.
Los medios de comunicación argelinos indican que los 6 individuos planeaban «atentar contra la seguridad del Estado», la acusación más grave que se puede formular en el país. El anuncio se produce el mismo día en que se celebra una reunión del Alto Consejo de Seguridad presidida por Abdelmadjid Tebboune.
«El fiscal de la República ante el tribunal de Tlemcen ha informado este domingo en un comunicado hecho público que se ha desmantelado una red criminal especializada en espionaje. Planeaban atentar contra la seguridad del Estado. Seis sospechosos, tres argelinos y tres marroquíes, han sido detenidos y puestos a disposición del tribunal competente», indica la prensa argelina.
Por supuesto, la película de espionaje inventada por las autoridades argelinas no deja ninguna duda sobre las intenciones de estos supuestos espías y del centro de mando. Los presuntos espías encarcelados «recibían instrucciones del tal B.S., de nacionalidad marroquí, con el objetivo de desestabilizar el país», afirma un medio de comunicación argelino.
Según la misma fuente, el desmantelamiento de esta red se produce tras la detención de un marroquí que entró ilegalmente en territorio argelino, «donde se reclutaba a ciudadanos marroquíes y argelinos con el objetivo de atentar contra las instituciones de seguridad y administrativas argelinas». No se han aportado detalles ni pruebas para explicar estas acusaciones.
Esta noticia recuerda los vídeos fabricados por los servicios de inteligencia argelinos que escenificaban detenciones similares a la manera de una película de acción en la que los presuntos delincuentes entraban en furgones policiales haciendo ver que estaban esposados, o cuando supuestos espías marroquíes confesaban todo tipo de delitos ante la cámara en un dialecto argelino.
La «caza de brujas» contra los marroquíes iniciada por el poder argelino desde 2019 sigue dando noticias. En las últimas semanas, las autoridades argelinas han conducido en varias ocasiones a grupos de marroquíes que residían en Argelia hasta la frontera de Zouy Beghal para expulsarlos.
Esta práctica es utilizada por ambos países (más por Argelia que por Marruecos) para devolver a antiguos presos que han cumplido su condena o incluso a ciudadanos fallecidos, a pesar del cierre de las fronteras desde 1994.
