Rue20 Español – Rabat
La 81ª edición de la Mostra de Venecia, que arrancó el 28 de agosto y se extenderá hasta el 7 de septiembre, ha desplegado su emblemático alfombrado rojo en la Sala Grande, inaugurando una semana de cine que se prevé memorable. Bajo la radiante luz del sol de la laguna, las estrellas más brillantes del firmamento cinematográfico internacional, desde Sigourney Weaver hasta Brad Pitt y Angelina Jolie, han comenzado a desfilar en este evento que, como cada año, marca un hito en el calendario cultural global.
En este marco de glamour y cine de alta gama, Marruecos ha dejado su huella con la destacada participación de una delegación encabezada por Abdelaziz El Bouzdaini, director del Centro Cinematográfico Marroquí (CCM). Su presencia no es solo simbólica; representa el esfuerzo estratégico y continuado del Reino por consolidarse en la escena internacional. El Bouzdaini, un arquitecto del cine marroquí, ha aprovechado la Mostra para avanzar en su misión de proyectar el séptimo arte marroquí más allá de sus fronteras.
La edición de este año de la Mostra no solo es una vitrina para el talento y las grandes producciones, sino también un reflejo de las tendencias más audaces del cine contemporáneo. Con temáticas que van desde la exploración del erotismo, como se ve en películas como Diva Futuro de Riccardo Schicchi, hasta diálogos profundos sobre la guerra y la cultura, representados en el esperado film de Amos Gitai, el festival ofrece una programación tan diversa como provocadora. En medio de este panorama, Marruecos se posiciona como un actor en ascenso, con El Bouzdaini liderando el esfuerzo para asegurar que el cine marroquí no solo sea visto, sino también admirado.
La presencia marroquí en Venecia se ha visto reforzada por paneles y encuentros organizados por el CCM, donde la delegación ha explorado nuevas oportunidades de colaboración con productores internacionales. Estas iniciativas están alineadas con la visión de Su Majestad el Rey Mohamed VI, quien ha subrayado la importancia del soft power para fortalecer la posición de Marruecos en el mundo. La Mostra, con su combinación de cine y poder político, es el escenario ideal para que Marruecos avance en esta dirección.
Además de las actividades en Venecia, el cine marroquí tiene una serie de citas importantes en el horizonte, con el Festival de Tánger y el Festival de Marrakech a la vuelta de la esquina. Estos eventos nacionales, que cada vez ganan más reconocimiento, ofrecerán otra oportunidad para que el cine marroquí brille con luz propia.
La Mostra de Venecia, con su atención al detalle y su mirada puesta en las nuevas corrientes cinematográficas, no solo celebra el cine, sino que también marca el rumbo de la industria global. En este contexto, Marruecos, impulsado por figuras comprometidas como Abdelaziz El Bouzdaini, se asegura de que su cine no solo participe en estos espacios, sino que lo haga con un impacto duradero. Así, con las estrellas deslumbrando en la alfombra roja, Marruecos continúa forjando un camino sólido hacia un futuro cinematográfico prometedor.