Rue20 Español/ Rabat 14/08/2024
Walid El Moumen
Las noticias internacionales han estado muy presentes hoy miércoles en la prensa española. Junto con la promesa del nuevo presidente de la Generalitat, Salvador Illa, de que los Mossos dejarán de trabajar al margen de la confrontación política, han ocupado el primer plano de los principales periódicos españoles.
Empecemos desde Cataluña. ABC escribió en su subtítulo que el presidente ha salido en defensa del «cuerpo», tras la fuga del líder de Junts, Carles Puigdemont, refiriéndose así a los Mossos, que fueron acusados ayer por la misma causa por el Ministerio del Interior.
La Vanguardia recogió que el presidente anuncia una ampliación de la plantilla del cuerpo hasta 22.000 agentes para el año 2030. Así, podrán trabajar «al margen de la confrontación política» y en un «clima sosegado», tal como ha dicho el líder del PSC.
Pasando ahora a lo que concierne a todo el mundo, «la OMS declara una nueva emergencia de salud pública internacional por la viruela del mono», según tituló El Mundo.
El País destacó en su portada que la organización toma la medida por la expansión de una variante del virus aparentemente más letal en África.
Esta medida, según la misma fuente, se ha tomado solo un día después de que los Centros Africanos para el Control y Prevención de Enfermedades decretaran la alerta en el continente, después de haber registrado 15.000 casos y 461 muertes por este virus en lo que va del año.
En cuanto a la última noticia, está relacionada con la guerra de Ucrania. El periódico recién citado subrayó que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, está realizando en suelo ruso su apuesta más arriesgada para recuperar la iniciativa en la guerra.
«La incursión del ejército ucraniano en la provincia de Kursk evidencia las debilidades militares del enemigo, pero eleva la tensión entre Kiev y sus aliados con el Kremlin», dijo El País, inclinándose un poco hacia la versión occidental.
En definitiva, la iniciativa tomada por el ejército ucraniano puede llevar a dos posibles desenlaces: uno que obligará a Rusia a negociar sin imponer su mano superior, y otro que podría llevar a una invasión completa de las tropas rusas al territorio ucraniano, con una gran probabilidad de un enfrentamiento directo entre el heredero de la URSS y la OTAN.
