Rue20 Español/ Rabat
Walid El Moumen
El oro de Soufiane El Bakkali y el bronce de la selección nacional bajo el mando de Tariq Sektioui en los Juegos Olímpicos de París 2024 no pueden cubrir el fracaso marroquí en el resto de los deportes.
La decepcionante participación de la delegación marroquí en París 2024 ha planteado varias preguntas sobre el futuro del deporte en el Reino de Marruecos. 60 deportistas son los que participaron en esta edición, sin embargo, no lograron resultados notables, excepto la medalla de oro de Soufiane El Bakkali en los 3000 metros con obstáculos y la de bronce de la selección olímpica marroquí de fútbol masculino.
En una declaración que coincidió con la ceremonia de clausura de este foro deportivo mundial, Nawal El Moutawakel, ex campeona olímpica y presidenta de la Federación Real Marroquí de Deportes para Todos, calificó los resultados de Marruecos como «negativos y catastróficos«, a pesar de los éxitos individuales mencionados.
Los resultados provocaron un amplio debate en redes sociales y entre expertos deportivos, quienes cuestionaron la gestión y el desempeño del deporte en Marruecos, en contraste con las declaraciones oficiales que consideraron la actuación «positiva».
Entre los factores que han contribuido a este resultado catastrófico, se destacan la falta de preparación adecuada, la mala gestión técnica y la ausencia de Marruecos en varias disciplinas atléticas importantes, lo que exige un gran trabajo por parte de los responsables para futuras competencias.
En este sentido, los expertos sugirieron la necesidad de reestructurar el sector deportivo en Marruecos, incluyendo la creación de un laboratorio científico olímpico, una mejor legislación y un enfoque más científico para desarrollar a los atletas y prepararlos para futuras competiciones olímpicas.
Como reflexión sobre el futuro, se planteó la urgencia de formular un proyecto nacional para preparar a los futuros campeones olímpicos y reformar el sistema deportivo escolar y universitario en Marruecos para mejorar los resultados en competencias internacionales.
Con las dos medallas conquistadas, Marruecos comparte el sexagésimo lugar con Guatemala a nivel mundial y ocupa el quinto lugar a nivel árabe. Este resultado vuelve a cuestionar el trabajo de los responsables de las federaciones deportivas en Marruecos que, salvo la Real Federación Marroquí de Fútbol bajo el mando de Fouzi Lekjaa, no pudieron hacer nada para el deporte marroquí.
