Rue20 Español/Monrovia
Una delegación marroquí participó, el lunes en Monrovia, en los trabajos de la Reunión de Alto Nivel de los ministros de Asuntos Exteriores, Finanzas y Defensa de la Unión del Río Mano (URM), por invitación de sus Estados miembros.
La delegación marroquí estaba encabezada por el embajador director general de la Agencia Marroquí de Cooperación Internacional, Mohamed Methqal. También incluía al embajador de Marruecos en Guinea y Sierra Leona, Isam Taïb.
La ceremonia de apertura de esta reunión contó con la participación del presidente de Liberia, Joseph Nyuma Boakai, así como ministros y expertos de las delegaciones de los Estados miembros de la Unión del Río Mano (Costa de Marfil, Guinea, Liberia y Sierra Leona).
En esta reunión de alto nivel, Methqal pronunció un discurso en nombre del ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita, en el que afirmó la disposición del Reino de Marruecos a continuar, de conformidad con las Altas Orientaciones Reales, su acompañamiento a los Estados miembros y a la Secretaría de la URM a nivel bilateral, regional y multilateral.
En el comunicado final conjunto adoptado al término de esta reunión, los ministros se congratularon del importante papel desempeñado por el Reino de Marruecos como socio bilateral estratégico e histórico de los Estados miembros de la Unión del Río Mano, así como de su apoyo firme y constante al desarrollo de esta organización subregional.
En esta reunión, las delegaciones de la URM examinaron una serie de cuestiones políticas, económicas, sociales, de seguridad e institucionales destinadas a revitalizar su Unión, especialmente en lo que respecta a la movilidad de personas y bienes, y a la aplicación del marco institucional de la CEDEAO.
En la reunión también se abordó la cuestión del proyecto piloto de moneda única y los medios para reforzar la capacidad institucional de la Secretaría de la Unión del Río Mano.
Es de recordar que Marruecos es miembro observador en la Unión del Río Mano desde 2002, cuando el Reino había facilitado una mediación entre Sierra Leona, Liberia y Guinea para restablecer la confianza y la paz en la región, lo que permitió poner fin a los conflictos que obstaculizaban las relaciones entre estos países.