Rue20 Español/ Rabat
Marruecos se está preparando para el Mundial de Fútbol 2030 con una infraestructura deportiva impresionante, y al frente de esta transformación está Sonarges, la Sociedad Nacional de Realización y Gestión de Estadios. Esta organización, esencial en el desarrollo de los grandes estadios del país, está en camino de convertirse en un gigante africano en la gestión de infraestructuras deportivas.
Sonarges ha jugado un papel crucial en la modernización y gestión de estadios emblemáticos como el Gran Estadio de Marrakech, el Gran Estadiode Tánger y el Complejo Deportivo de Fez. Recientemente, la organización ha lanzado ambiciosos proyectos de sostenibilidad, incluyendo la instalación de centrales fotovoltaicas para reducir el consumo energético y la reutilización de aguas para el riego de campos deportivos. Estos proyectos no solo demuestran el compromiso de Marruecos con la sostenibilidad, sino que también posicionan al país como un líder en infraestructuras deportivas ecológicas.
La expansión de Sonarges también incluye la posibilidad de gestionar el Complejo Mohammed V en Casablanca, un movimiento que consolidaría su papel como el brazo ejecutor del Estado en materia de infraestructuras deportivas. Esta gestión integral asegura que los estadios marroquíes no solo cumplan con los estándares internacionales, sino que también sean lugares de encuentro y espectáculos deportivos de primer nivel.
La visión de Sonarges está alineada con las directrices de SM el Rey Mohamed VI, quien ha enfatizado la importancia de la excelencia, la innovación y la pasión deportiva. Con su liderazgo, Marruecos no solo está listo para albergar el Mundial 2030 junto con España y Portugal, sino que también se está posicionando como un modelo a seguir en la gestión de infraestructuras deportivas en África y el mundo.
Invitamos a nuestros amigos de América Latina a seguir de cerca estos desarrollos y a ser parte de esta emocionante jornada hacia el Mundial 2030. Marruecos está listo para ofrecer una experiencia deportiva inolvidable, y Sonarges está en el corazón de esta transformación.