Rue20 Español/ Fez 08/07/2024
Walid El Moumen
La derrota de Marine Le Pen y su partido, el ‘Rassemblement National’, en las elecciones legislativas ha provocado varias preguntas sobre cómo ha fracasado por tercera vez en llegar al gobierno, especialmente en unas elecciones donde estuvo a punto de dominarlas, sin una unificación e intensificación de los esfuerzos por parte del centro y los izquierdistas del Nuevo Frente Popular.
Empecemos con un artículo de El País titulado ¿Quién frenó a la extrema derecha en Francia?. En él se afirmó que los votantes de centro y de izquierda se apoyaron para ganar decenas de asientos, lo que resultó en alcanzar la mayoría absoluta, diciendo no a la tendencia ultraderechista en Francia.
Según La Vanguardia, el NFP logró contener el ascenso de la extrema derecha, ya que para gobernar se requiere lograr al menos 289 escaños de una Asamblea Nacional constituida por 577 diputados, un número que dejó a los lepenistas muy lejos de su objetivo.
Con este resultado, según El País, la UE respira con alivio tanto en Bruselas como en numerosas capitales, que observaban con inquietud y cierto pesimismo la segunda vuelta decisiva de las elecciones legislativas en el país galo. Todo esto, gracias al dique francés; y como prueba citamos lo que dijo el primer ministro polaco, Donald Tusk: “En París, entusiasmo; en Moscú, decepción; en Kiev, alivio”.
De momento, las reclamaciones del lado izquierdista se ven intensificadas cada vez más; todos quieren un primer ministro de un trasfondo izquierdista.
Jean-Luc Mélenchon, líder de la Francia Insumisa, no dudó en hacer esto; aboga fuertemente por el nombramiento de un primer ministro de la alianza de izquierdas.
Según lo recogido por La Sexta, Mélenchon ha considerado un «alivio» que no se haya producido la victoria que se había pronosticado de la extrema derecha. Sin embargo, el político también cree que los resultados de las legislativas «confirman la derrota del presidente y de su coalición», tras lo que le ha pedido que «no intente escapar de esa derrota con subterfugios».
El mismo medio de comunicación destacó que Macron, ahora, intenta suavizar el giro a la izquierda en una Francia con múltiples escenarios abiertos.
«La falta de una mayoría clara en los resultados de las elecciones francesas plantea varias posibilidades sobre quién podrá ser el nuevo primer ministro galo. La izquierda francesa busca gobernar en minoría frente a un Macron que huye de los extremos», confirmó el canal televisivo.
