Rue20 Español/ Fez 04/06/2024
Walid El Moumen
La citación del juez a la esposa de Pedro Sánchez, Begoña Gómez, como imputada, sin esperar a la declaración de los testigos, ha conmovido la escena política española, en medio de la campaña electoral de las Europeas (9-J). La noticia ha acaparado las portadas de los periódicos españoles, convirtiéndose en el tema más abordado del día.
Comencemos con El País, el cual escribió en su introducción que el titular del Juzgado de Instrucción número 41 de Madrid, Juan Carlos Peinado, ha citado a declarar como investigada a Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el próximo 5 de julio.
En El Mundo, volvieron a recordar que la esposa del jefe de la Moncloa se declarará como investigada por los delitos de tráfico de influencias y corrupción en el sector privado.
Ante esta delicada situación, el Gobierno expresó estupor ante esta citación argumentando que «carece de lógica procesal», según un titular de La Vanguardia.
ABC dijo que el Gobierno ha sembrado dudas sobre la actuación del juez. Según el subtitular del periódico, la portavoz del Ejecutivo, Pilar Alegría, indicó que la citación responde a una estrategia de tráfico de influencias y corrupción en el sector privado.
Mientras tanto, el presidente del Gobierno considera extraño que la citación a su mujer llegue apenas cinco días antes de las elecciones europeas y califica la acusación de «zafio montaje» en su nueva misiva, citó ABC en otra noticia titulada «Sánchez envía otra carta a la ciudadanía para acusar al juez del caso Begoña Gómez de intentar «interferir en el resultado del 9-J»».
En su carta publicada la tarde de este miércoles, el jefe de la Moncloa se dirigió al pueblo animándoles a votar contra Feijóo y Abascal como “promotores” de esta maniobra para influir en el resultado electoral, según lo subrayado por El País.
Aquí está la nueva carta de Pedro Sánchez a la ciudadanía española:
Mi esposa y yo hemos tenido conocimiento hoy mismo, a través de los medios de comunicación, de la citación a Begoña como investigada el próximo día 5 de julio. Esta decisión se anuncia solo cinco días antes de que se celebren elecciones al Parlamento Europeo, lo cual resulta extraño. Habitualmente, se ha seguido la regla no escrita de no dictar resoluciones susceptibles de condicionar el desarrollo normal de una campaña electoral y, por tanto, el voto de los ciudadanos. En este caso, resulta evidente que esta práctica no se ha respetado. Dejo al lector extraer sus propias conclusiones.
Quisiera trasladarle que ambos estamos absolutamente tranquilos. No hay nada detrás de esta acusación, sólo un zafio montaje impulsado por las asociaciones ultraderechistas demandantes. Con todo, hay una lectura política que me veo en la obligación de compartir con usted.
Como ya recordará, en mi anterior carta denuncié la deriva de una coalición reaccionaria capitaneada por el Sr. Feijóo y el Sr, Abascal -o por el Sr. Abascal y el Sr. Feijóo, tanto monta, monta tanto-, para usar todos los medios a su alcance con el fin de quebrarme en el plano político y personal. Su objetivo es que yo renuncie, que dimita. Incluso, como supimos ayer, tratar de forzar mi salida de la Presidencia del Gobierno con una moción de censura mediante una alianza contra natura. Todo les vale.
Lo que no lograron en las urnas, pretenden alcanzarlo de manera espuria. También sabía que, conforme aumentara la frustración y la impotencia de esta coalición reaccionaria, el ritmo de la máquina del fango no iba a parar, sino a acelerarse. Ante esta certeza, me pregunté si merecía la pena o no continuar en el ejercicio de mis responsabilidades
Quiero decirle que mi decisión de continuar al frente de la Presidencia del Gobiemo es más firme que nunca. Que la tarea que tiene el Gobierno de coalición progresista es mas necesaria que nunca.
Nuestro horizonte permanece inalterable: consolidar la pujanza del crecimiento económico y la creación de empleo, como hoy acabamos de conocer; redistribuir los frutos de ese crecimiento entre la clase media y los trabajadores para luchar contra la mayor de las injusticias, que es la desigualdad; regenerar la vida democrática reivindicando e| juego limpio por encima del fango que algunos pretenden esparcir, avanzar en derechos y en libertades sin dar un paso atrás; y contribuir a la paz en el mundo, con especial atención a Ucrania y Palestina.
Estos próximos días, usted será testigo de una cuidada coreografía diseñada por la coalición ultraderechista para intentar condicionar las elecciones y debilitar al Gobierno. Begoña y yo sabemos perfectamente por qué la atacan. Ninguno de los dos somos ingenuos. Lo hacen porque es mi pareja.
Ella es una mujer trabajadora y honesta que reivindica su derecho a trabajar sin renunciar a ello por las responsabilidades de su marido. Derecho que yo defiendo en mi vida familiar y por el que trabajo como presidente del Gobierno de España para garantizar que hombres y mujeres tengamos las mismas oportunidades y los mismos derechos
Estos días leerá y escuchara usted mucho ruido y aún más furia en tabloides digitales nacidos para propagar bulos, en platós de tertulias televisivas y radiofónicas al servicio de amplificar esa desinformación, y en tribunas donde se rasgarán las vestiduras el Sr. Feljóo y el Sr. Abascal. Todo, mentira. Un gran bulo. Uno más. En lo que respecta a mí, no le quepa duda de que no me quebrarán.
Y, dado que tratan de interferir en el resultado electoral del próximo día 9 de junio, ojalá sus promotores -el Sr. Feijóo y el Sr. Abascal-, encuentren la respuesta que merecen en las urnas: condena y rechazo a sus malas artes. Quedan unos días de ruido antes de las elecciones y unos pocos más antes del verano. Pero también quedan más de tres años de Gobierno, de progreso y de avances.
Atentamente, Pedro Sánchez