Rue20 Español/Rabat
El ministro de Inclusión Económica, Pequeña Empresa, Empleo y Competencias, Younes Sekkouri, ha afirmado que Marruecos ha dado pasos importantes en el camino hacia la construcción del estado social, un proyecto sin precedentes en el siglo XXI que ha ideado Su Majestad el Rey Mohammed VI para todos los marroquíes, con el fin de proteger sus vidas y proporcionarles las condiciones de vida digna que corresponden al lugar de Marruecos entre los pueblos y las naciones.
En un discurso con motivo del 1 de mayo, Sekkouri destacó que la voluntad real ha establecido un sistema integral para los ciudadanos sin ingresos a través del lanzamiento del programa real de apoyo directo, que incluye a 3,5 millones de familias; es decir, a unos 12 millones de ciudadanos.
También mencionó el programa real de apoyo a la vivienda, que proporciona subvenciones que alcanzan hasta un tercio del coste de la adquisición de una vivienda.
Añadió que los pilares y mecanismos del estado social han proporcionado una cobertura social sin precedentes basada en una reforma integral del sector sanitario y en la cobertura de amplios sectores de la población.
«Ahora contamos con un sistema basado en la participación y otro en la solidaridad, con reglas transparentes y una oferta sanitaria en constante evolución».
Señaló que el estado social también representa una construcción participativa en la que todas las fuerzas vivas del país contribuyen de forma civilizada que se corresponde con la rica historia de Marruecos, con su arraigado proceso democrático y con la aspiración de sus hijos e hijas de construir un futuro mejor basado en la prosperidad, el desarrollo y la paz social.
Todos estos elementos, añade Sekkouri, han situado al gobierno ante su responsabilidad histórica de aplicar las altas directrices reales en el marco de un diálogo social productivo y justo que tenga en cuenta los intereses de los trabajadores marroquíes y la competitividad del tejido económico nacional, con el fin de mejorar las condiciones de vida, lograr un trabajo decente, ampliar las libertades y garantizar la sostenibilidad de las empresas marroquíes.
Expresó su esperanza de «mirar al futuro con optimismo y bondad, que sólo se pueden alcanzar trabajando duro y teniendo determinación para mejorar las condiciones de nuestros trabajadores, que hacen un gran esfuerzo y se sacrifican por un Marruecos avanzado, productivo y solidario».