Rue20 Español/Rabat
Zakariae Alem
Walid Regragui, seleccionador de Marruecos, sigue con su viaje en Oriente Medio para seguir a los jugadores marroquíes que militan en Arabia Saudí y en otros países del Golfo, tal como Soufiane Rahimi, Abderrazak Hamdallah, Yassine Bono y Romain Saïss.
El entrenador marroquí estuvo presente en el partido de Al-Ain y Al Hilal, en la vuelta de semifinales de la Champions Asiática, cuando el equipo de Emiratí de Rahimi pudo superar a su rival saudí donde milita el portero de la selección marroquí, Yassine Bono.
Además, Regragui estuvo presente en el duelo entre Al Wehda de Munir Mohamedi y Al Hazem de Fayçal Fajr, en la Liga Roshn de Arabia Saudí. Ayer, Walid siguió desde las gradas en enfrentamiento entre Abderrazak Hamdallah (Al Ittihad) y Romain Saïss (Al Shabab). El partido terminó con una victoria del equipo del defensa marroquí 1-3 a pesar del gol de Hamdallah en la segunda parte.
Asimismo, el seleccionador marroquí atendió a los micrófonos del canal saudí Arriyadiyah. Regragui aseguró su compromiso con la selección de su país: “Ahora solo estoy concentrado en la selección marroquí. No obstante, tengo la ambición de entrenar en Europa”.
“En el caso de no poder entrenar en Europa, ¿por qué no hacerlo en la zona árabe, precisamente en Arabia Saudí?”, añadió Regragui dejando las puertas abiertas para cualquier posibilidad en el futuro.
En una etapa anterior, Walid Regragui no contaba tanto con los jugadores que militan en la zona árabe, incluso los jugadores de la liga local marroquí. Por ejemplo, pocos jugadores de la Liga Roshn de Arabia Saudí fueron convocados con la selección absoluta. Por ejemplo, Hamdallah en el Mundial de Qatar solo fue convocado después de una presión muy grande por parte de la afición marroquí en redes sociales.
Después de la revolución del fútbol saudí, que trajo a numerosas estrellas de fútbol (varios marroquíes), además de la dura eliminación de la selección marroquí de la última CAN de Costa de Marfil, Regragui decide abrir más las puertas del equipo nacional para los jugadores militantes en Oriente Medio.
El ejemplo más reciente es el de Soufiane Rahimi, que fue convocado en la última cita del mes de marzo y que dejó buenas sensaciones en los partidos amistosos de Angola y Mauritania.
Con su presencia en Arabia Saudí, Walid no solo quiere ver de cerca el nivel de los jugadores marroquíes ahí, sino también la evolución del fútbol en general en este país, el nivel de los equipos, la aportación de los jugadores extranjeros nuevos, etc.
El fin que tiene Regragui es asegurarse de la ‘credibilidad’ del rendimiento de los jugadores que brillan ahí. Si considera que la Liga Roshn saudí es exigente tal como las ligas europeas, tomará muy en serio la brillantez de Hamdallah y compañía y todo apunta a que así será.