Rue20 Español/Rabat
Zakariae Alem
El Real Madrid ganó 3-2 al FC Barcelona en el Santiago Bernabéu, en la jornada 32 de LaLiga, dando un golpe fuerte en la mesa y acercándose al título liguero. El gol de Bellingham en el descuento, tras una impresionante arrancada de Brahim, dio la victoria a los merengues.
El Barça empezó fuerte, con un gol de Andreas Christensen, en el minuto seis tras un córner bien lanzado por Raphinha. El portero Lunin medió mal su salida y Christensen aprovechó el error para meter el baló dentro de la red.
El Real Madrid intentó atacar a base de la posesión, buscando huecos; mientras que el FC Barcelona creaba peligro desde los córners. En el minuto 18, Lucas Vázquez penetró desde la derecha, se metió en el área y Cubarsí cometió una infracción cerca de la portería. El árbitro no dudó en pitar penalti. Vinicius lo transformó con éxito para lograr el empate.
El partido siguió con las mismas sensaciones. Un Real Madrid que intentaba construir y un Barça peligroso en balones parados. En el minuto 27 el equipo catalán volvió a amenazar seriamente desde otra saque de esquina lanzada por Raphinha. Lamine Yamal tocó el balón con la escuela y Lunin lo sacó en la línea de fondo. El VAR tuvo que intervenir para dictaminar que no era gol.
El fin de la primera mitad vio la lesión de Frenkie de Jong, que salió en camilla para dejar su puesto a Pedri. En el minuto 69, Fermín López volvió a poner al Barça por delante. Tras un disparo de Yamal desde fuera del área, Lunin dejó muerta la pelota en el área chica y Fermín la puso dentro.
El Real Madrid no tardó en reaccionar. Cuatro minutos después, Lucas Vázquez marcó el empate tras un centro impresionante de Vinicius desde la banda izquierda. Joao Cancelo quedó mal parado dejando a Lucas Vázquez libre de marca, que pudo rematar el balón. Vinicius estuvo a punto de marcar el tercero en un mano a mano, pero Ter Stegen pudo sacar el disparo a la manera de los porteros de balonmano.
En el alargue, Brahim lideró un ataque del Real Madrid, rompiendo líneas y dando un buen pase a Lucas, que centró hacia Jude Bellingham, que puso la pelota dentro de la portería. El Barça tiró de coraje para lograr el empate en el tiempo restante pero no pudo lograrlo.