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El Abbas Tahri Joutey Hassani
Marruecos consiguió un fuerte aumento en los ingresos procedentes de las exportaciones de hortalizas frescas durante 2023.
Las exportaciones hortofrutícolas marroquíes alcanzaron casi los 1.600 millones de dólares el año pasado; lo que supone un incremento del 12% con respecto a 2022 y casi un 50% más que la media de los últimos cinco años, según revela un análisis de la empresa EastFruit.
Este aumento se produce a pesar de que los volúmenes físicos exportados disminuyeron un 14 % hasta las 1.060 toneladas, debido a las inusuales condiciones climáticas.
Según EastFruit, «los fenómenos meteorológicos adversos provocaron una caída del 14% en los volúmenes exportados de hortalizas frescas».
Sin embargo, esta cifra aún resulta un 5% superior a la media quinquenal.
Los tomates de invernadero continúan siendo el principal producto exportado por Marruecos.
En 2023, las ventas al exterior de este cultivo alcanzaron casi los 1.200 millones de dólares, lo que supone casi tres cuartas partes del valor total de las exportaciones hortofrutícolas marroquíes.
No obstante, las exportaciones de tomate descendieron un 11 % hasta las 660.000 toneladas, debido a las altas temperaturas estivales.
Otros productos que desempeñan un papel relevante son los pimientos dulces, con 174.000 toneladas exportadas y 230 millones de dólares ingresados, lo que supone incrementos del 4% y 55% respectivamente.
Por detrás se sitúan los calabacines, calabazas y pepinos de invernadero; éstos últimos registraron un aumento del 60 % en sus envíos al exterior durante 2023.
Gracias a estos resultados, Marruecos consolidó su posición como tercer mayor exportador mundial de tomates frescos, solo por detrás de México y Países Bajos.
Un dato que, según EastFruit, demuestra «un robusto incremento en sus ingresos por exportaciones dentro del sector de hortalizas frescas».
