Rue20 Español/Beni Mellal
El Abbas Tahri Joutey Hassani
España, que también sufre de falta de precipitaciones en algunos años, está interesada en el recurso de Marruecos a la siembra de nubes en los últimos años para combatir la escasez de lluvias y la sequía resultante, con sus impactos negativos en el sector agrícola.
Según un informe del periódico español Ecoticias, especializado en noticias económicas, España está interesada en conocer los resultados de este paso dado por Marruecos; «especialmente ante la existencia de algunos riesgos relacionados con la posibilidad de fuertes lluvias que provoquen inundaciones como consecuencia de la siembra de nubes en algunos casos».
Marruecos ha estado enfrentando una escasez de lluvias en los últimos años, lo que ha llevado a una disminución en las reservas de agua y un impacto negativo en el sector agrícola.
Para ayudar a mitigar los efectos de la sequía, el Gobierno marroquí ha recurrido a la tecnología de la siembra de nubes, un proceso en el que se liberan sustancias químicas en las nubes para aumentar las posibilidades de lluvia.
Marruecos comenzó las operaciones de siembra de nubes en noviembre de 2021; utilizando sustancias químicas que el ministro de Equipamiento y Agua, Nizar Baraka, confirmó que «no dañan el medio ambiente».
Marruecos llevó a cabo 5 operaciones de siembra de nubes entre noviembre y diciembre de 2021, con el objetivo de aumentar la cantidad de lluvia hasta un máximo del 17 %.
Los datos indican que las Fuerzas Armadas Reales, a través de sus pilotos militares y expertos técnicos, además de elementos de la Gendarmería Real, son la entidad autorizada para llevar a cabo estas operaciones a través de un programa llamado «Al Ghait».
Marruecos suele elegir la región del Atlas para realizar esta operación a través de 3 estaciones: Beni Mellal, El Hayeb y Azilal; debido a la disponibilidad de nubes aptas para el proceso de siembra.
La operación requiere coordinación entre los servicios meteorológicos y la Gendarmería Real para determinar el momento adecuado para su ejecución en función de las predicciones de los satélites.
La Fuerza Aérea luego siembra las nubes con «yoduro de plata» o sal «cloruro de sodio», según su temperatura.
España, que sufre de falta de precipitaciones en algunos años, también está considerando tomar medidas similares a las que sigue Marruecos, incluida la lluvia artificial.
El seguimiento de España a los esfuerzos de Marruecos en esta área muestra su interés en encontrar soluciones efectivas para combatir la sequía y garantizar la seguridad hídrica.
En definitiva, estos pasos indican una creciente conciencia de la necesidad de adoptar tecnologías modernas para enfrentar los desafíos climáticos; especialmente ante la creciente severidad de la sequía en todo el mundo.
