Rue20 Español/El Aaiún
El Abbas Tahri Joutey Hassani
En un movimiento estratégico para reforzar su capacidad defensiva, Marruecos ha adquirido 200 lanzadores y 612 misiles FGM-148F Javelin, un potente sistema de armas antitanque de fabricación estadounidense.
Esta adquisición, valorada en aproximadamente 260 millones de dólares, forma parte de un acuerdo que también incluye sistemas de simulación para el entrenamiento de las fuerzas armadas marroquíes, tal como recoge el medio español La Razón.
Según fuentes norteamericanas, esta venta propuesta apoya la política exterior y la seguridad nacional de los Estados Unidos, al ayudar a mejorar la seguridad de un importante aliado no perteneciente a la OTAN que continúa siendo una fuerza estabilizadora en el norte de África.
Marruecos desempeña un papel crucial en la región; contribuyendo a la estabilidad política y el progreso económico.
La adquisición de los misiles Javelin FGM reforzará significativamente la capacidad defensiva a largo plazo de Marruecos; permitiéndole defender su soberanía e integridad territorial de manera más efectiva.
Estos misiles antitanque de última generación son capaces de destruir tanques modernos mediante un ataque superior; golpeándolos desde arriba, donde su blindaje es más delgado.
El Javelin FGM ha demostrado su eficacia en numerosos enfrentamientos, con alrededor de 5.000 usos exitosos hasta 2019, según afirma el fabricante.
Su capacidad para penetrar blindajes de más de 600 mm lo convierte en un arma formidable contra amenazas blindadas.
Las autoridades estadounidenses han asegurado que esta venta no alterará el equilibrio militar básico en la región.
Además, se espera que Marruecos no tenga dificultades para integrar este equipo en sus fuerzas armadas, gracias a su experiencia y capacidad de absorción.
La adquisición de los misiles Javelin FGM por parte de Marruecos representa un paso significativo en el fortalecimiento de sus capacidades defensivas y su posición como un aliado clave en el norte de África.
Este acuerdo no sólo refuerza los lazos entre Marruecos y Estados Unidos, sino que también contribuye a mantener la estabilidad y el progreso en la región.