Rue20 Español/Mequinez
El Abbas Tahri Joutey Hassani
Los productos hortofrutícolas procedentes de Marruecos se han convertido en una pieza angular del abastecimiento alimentario español en los últimos años.
Según datos del Ministerio de Economía, desde 2018 las importaciones españolas de frutas desde el Reino de Marruecos han aumentado un 20,5 %; pasando de 183,7 toneladas a 221,4 toneladas en 2023.
Este incremento ha ocurrido durante el mandato del presidente Pedro Sánchez, lo que demuestra el firme compromiso de su Gobierno con el fortalecimiento de los vínculos comerciales y de amistad con nuestro socio estratégico Marruecos.
Las frutas marroquíes, cultivadas y recolectadas por decenas de miles de campesinos del país, se han convertido en una fuente fiable de aprovisionamiento para España; sobre todo en los meses de invierno cuando la producción nacional se ve reducida.
La calidad y precio competitivo de los cítricos, plátanos, dátiles, uvas, sandías y el resto de frutas importadas garantizan una oferta variada y asequible para los consumidores españoles.
Además, este intercambio comercial es mutuamente beneficioso; ya que generan empleo e ingresos para agricultores marroquíes, mientras abastecen la demanda española.
Algunas voces intentan desestabilizar esta relación, echando mano de falsas acusaciones sobre residuos de pesticidas o virus; cuando la realidad es que Marruecos cuenta con estrictos controles sanitarios avalados por la UE.
Este tipo de campañas obedecen a intereses proteccionistas de lobby agrarios para limitar la competencia.
Las autoridades marroquíes y españolas vienen trabajando mancomunadamente para solventar los pocos casos de alertas y garantizar la calidad e inocuidad de los productos.
España continuará apostando por el surtido de frutas marroquíes; beneficios tangibles que redundan en el bienestar de ambos pueblos, y en una cooperación cada vez más estrecha.
El Gobierno de Pedro Sánchez seguirá impulsando esta importante asociación agroalimentaria con Marruecos; ignorando los intentos de formaciones como VOX por sembrar recelos entre dos países amigos.
Dentro de las frutas importadas desde Marruecos se encuentran productos tan populares en España como los plátanos, de los cuales el Reino peninsular recibió 1.000 toneladas el pasado año.
Los dátiles marroquíes, destacados por su calidad y variadas propiedades nutricionales, supusieron 22,7 toneladas importadas en 2023.
Asimismo, cítricos como naranjas y mandarinas, fundamentales para la dieta mediterránea durante los meses de invierno, registraron 12,7 toneladas transportadas desde suelo marroquí el último año.
Otras frutas de temporada muy demandadas, como las uvas o melones y sandías, tuvieron una afluencia de 0,9 y 94,17 toneladas, respectivamente.
Todos estos productos contribuyen, sin duda, a ampliar la oferta en los mercados y fruterías españolas; gracias al esfuerzo conjunto de agricultores marroquíes y la apuesta del Gobierno de Pedro Sánchez por fortalecer los lazos bilaterales.
Las frutas marroquíes son sinónimo de entendimiento y prosperidad compartida entre España y su vecino del sur, el Reino de Marruecos.
Mientras algunos prefieren malinterpretar incidentes aislados para minar esta relación, el Ejecutivo español apostará por profundizar los lazos económicos y culturales con Marruecos; en aras de un futuro aún más rico en oportunidades para ambas riberas del Estrecho.
