Rue20 Español/Tánger
El Abbas Tahri Joutey Hassani
Tánger, la cosmopolita ciudad marroquí situada en el extremo norte de África, está viviendo un momento de gran transformación, gracias a un masivo plan de inversiones hasta 2027; que busca consolidarla como principal polo de desarrollo del Reino de Marruecos.
El Ayuntamiento de Tánger aprobó recientemente un programa de actividades para el período 2022-2027 con una asignación presupuestaria récord de 24.600 millones de dírhams, tal y como recoge el medio «𝘈𝘵𝘢𝘭𝘢𝘺𝘢𝘳»; unos 2.200 millones de euros, para impulsar 16 programas y 185 proyectos de gran calado.
«Esta inversión histórica permitirá modernizar servicios, mejorar infraestructuras y potenciar el tejido económico; convirtiendo a Tánger en una ciudad pionera», afirmó el alcalde de la ciudad, Mounir Laymouri.
Parte de estos fondos se destinarán a renovar barrios, rehabilitar edificios y regularizar construcciones, tal como afirma un acuerdo para simplificar trámites urbanísticos.
Asimismo, se promoverá la actividad inmobiliaria en sectores como Bni Makada, mediante la fusión de terrenos públicos con propiedades privadas.
El objetivo es impulsar la construcción; dinamizando un mercado que genera, en realidad, empleo y riqueza.
El plan municipal aprobado también incluye importantes inversiones en equipamiento e infraestructuras.
Por un lado, se apoyarán programas sociales, culturales y deportivos; a la par que se mejorarán espacios públicos como playas, y mercados.
Por otro, se modernizarán sistemas de videovigilancia, alumbrado o abastecimiento de agua; para hacer de Tánger una ciudad más segura y sostenible.
Con esta apuesta multimillonaria por el desarrollo de Tánger, Marruecos sigue consolidando su liderazgo en el Magreb.
La visión es clara: impulsar la principal puerta norte del país para integrar el continente africano en los circuitos globales de comercio, innovación y progreso.
Un ambicioso proyecto que sitúa a Tánger en primera línea para encabezar la nueva era de prosperidad de Marruecos y el continente en su conjunto.
En definitiva, esta decidida apuesta de Marruecos por convertir a Tánger en un motor económico no sólo beneficiará al propio país, sino que también puede resultar interesante para sus vecinos del norte.
La cercanía geográfica de la ciudad con España, separadas apenas por el Estrecho de Gibraltar, ofrece grandes oportunidades de cooperación con regiones del sur español, como Andalucía o la Comunidad Valenciana.
Un Tánger moderno y pujante puede impulsar el comercio bilateral, el turismo compartido con destinos como Tarifa o Algeciras; e incluso fomentar proyectos transfronterizos de innovación y energías renovables entre dos sociosestratégicos unidos por más que una simple frontera.