Rue20 Español/ Fez
Walid El Moumen
La Operación Ranger de la Guardia Civil española logró desarticular la banda de Bubu, el líder que dirigía desde el campo de Gibraltar a una organización de carácter policriminal, dedicada al tráfico internacional de cocaína, hachís y marihuana, así como el tráfico de migrantes procedentes de Marruecos.
«Agentes del Equipo de Delincuencia Organizada Antidroga (E.D.O.A.) de la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) de la Comandancia de Algeciras han culminado una operación en la que se ha desmantelado una importante organización criminal que se dedicaba a la introducción a gran escala de cocaína y hachís, cultivo y distribución de marihuana, así como al tráfico de migrantes procedentes de Marruecos», según informó un comunicado del Ministerio de Interior de España.
El comunicado ministerial señaló que la investigación ha tenido una duración de nueve meses, en la que llevaban a cabo una redada; fue culminada con la detención de 30 personas, entre ellos Bubu, el líder.
El carácter policriminal de la organización, según la misma fuente, ya sorprendió a los investigadores. Es que utilizan tecnologías avanzadas en sus operaciones como la botadura de embarcaciones de alta velocidad (EAV).
«Estas EAV, además de ser utilizadas para el transporte de hachís, también lo eran para transportar migrantes desde las costas marroquíes, y para rescatar mochilas de cocaína ocultas en buques portacontenedores procedentes de Sudamérica, antes de su llegada al Puerto de Algeciras», afirmó el comunicado.
El modus operandi que empleaban, consistía en su capacidad de realizar múltiples viajes incluso en un mismo día con una EAV trimotora para transportar migrantes irregulares desde Marruecos. Esto dotaba a la organización de mayor seguridad, efectividad y ganancias, según los estudios de los investigadores.
Con arreglo a esa situación, el Ministerio de Interior confirmó que las autoridades españolas se vieron obligadas a colaborar con diferentes agencias policiales de ámbito internacional, entre otros, la Gendarmería Real Marroquí, que desempeñó un papel primordial en materia de esa operación.
De momento, se han realizado 23 registros domiciliarios y la detención de 30 personas en las provincias Cádiz, Málaga, Pontevedra, Almería y la Ciudad Autónoma de Melilla, según subrayó el comunicado ministerial.