Rue20 Español/ Rabat
El Alto Comisario para los Antiguos Miembros de la Resistencia y del Ejército de Liberación y Presidente de la Federación Mundial de antiguos combatientes, El Mostafa El Ktiri, destacó el lunes en Lisboa la singularidad del modelo marroquí de tolerancia y convivencia.
El Ktiri, que participaba en el congreso internacional sobre la promoción de la historia, la salud y el apoyo social a los antiguos combatientes y sus familias, organizado por la Liga de Combatientes Portugueses, subrayó que el modelo marroquí de convivencia es ampliamente apreciado tanto en la región como en otros lugares.
En este contexto, indicó a la MAP, que su participación en este congreso, en calidad de Presidente de la Federación Mundial de antiguos combatientes, tras su elección por unanimidad el pasado mes de marzo en Belgrado, es un reconocimiento del lugar que ocupa el Reino en el seno de la comunidad internacional de antiguos combatientes de la resistencia.
Para él, la participación en este encuentro internacional se inscribe en el marco de las distinguidas relaciones entre el Alto Comisariado y la Liga de Combatientes Portugueses, señalando que su instancia trabaja para reforzar los lazos de cooperación en materia de memoria y para promover el patrimonio inmaterial y sus valores religiosos, nacionales y universales.
Este congreso es una oportunidad para rendir homenaje al «valor y sacrificio de aquellos que vistieron el uniforme para defender los valores fundamentales de nuestras sociedades», señaló, añadiendo que los antiguos combatientes de la resistencia son los guardianes de esta historia, de ahí el deber de reconocer y celebrar su inquebrantable dedicación a la paz y la seguridad.
Sin embargo, cree que el reconocimiento por sí solo no es suficiente, agregando que es fundamental garantizar que los antiguos combatientes reciban la atención médica y el apoyo psicológico necesarios, en particular en lo que respecta al trastorno de estrés postraumático, y ofrecerles apoyo psicológico, tanto individual como colectivo, para ayudarles a curar las heridas invisibles de la guerra.
«La memoria compartida de nuestras luchas y logros es un legado precioso. Nos recuerda las devastadoras consecuencias de la guerra y nos inspira a trabajar sin descanso para prevenir los conflictos, valorar la vida humana y promover la reconciliación», afirmó.
Tras destacar que los antiguos combatientes han dedicado su juventud y energía a defender los principios de paz, libertad y seguridad, el Presidente de la Federación Mundial de antiguos combatientes señaló que sus sacrificios no deben permanecer en las sombras de la historia, sino que deben ser reconocidos y honrados de forma tangible.
«Al promover la historia, contribuimos a preservar su memoria, que será un faro que ilumina el camino de las generaciones nacientes y futuras, mostrándoles la senda de la determinación, del sacrificio y de la perseverancia», subrayó.
El congreso, de dos días, se celebra para conmemorar el centenario de la creación de la federación, y cuenta con la presencia de personalidades y expertos de los países de habla portuguesa. El objetivo es examinar los medios de preservar la memoria histórica compartida y promover las condiciones de los antiguos combatientes y sus familias.