Rue20 Español/ Agadir
Abderrahmane Belaaichi
La organización de los grandes eventos internacionales es el sueño de las naciones. Es la máxima aspiración de los países por constituir una buena oportunidad para realizar avances en todos niveles y promover, sobre todo, la economía. La organización de los eventos internacionales es también otra manera de mostrar a los demás nuestras capacidades y potencialidades tanto humanas como materiales, nuestro saber hacer y nuestras capacidades de levantar los desafíos por ser un compromiso ante la comunidad internacional de respetar los acuerdos y los plazos.
Marruecos es uno de los países que tiene una larga tradición de organización de grandes eventos de gran envergadura; ha acumulado una experiencia no desdeñable que pasa en la mayoría de los casos a ser un ejemplo a seguir para países emergentes. Las reuniones anuales del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional celebradas en Marrakech del 7 al 15 de octubre de 2023 son un ejemplo más del compromiso de Marruecos ante la comunidad internacional y un signo de confianza e indicio de su capacidad de levantar retos organizacionales. Eminentes personalidades del mundo de la finanza y la política, expertos, analistas y periodistas de todo el mundo. Un éxito inédito tanto a nivel de la organización como a nivel de la calidad de las reuniones, coronadas por la firma de acuerdos bilaterales o multilaterales. Un impulso a las inversiones y sobre todo a la confianza en Marruecos de diversas entidades monetarias y financieras a escala internacional. Tal organización supone asimismo disponer de una logística gigante a nivel de la hostelería, a nivel del transporte aéreo internacional, a nivel de la comunicación y a nivel de la seguridad.
La organización de la Copa de África de 2025 y la organización tripartita de la Copa del Mundo de 2030 con España y Portugal consolidarán por supuesto la capacidad de Marruecos de competir con grandes naciones, con históricamente grandes capacidades y potencialidades. Corroborará por otra parte esa confianza que Marruecos ha sabido ir batiendo en silencio y con mucha serenidad a través de una serie de iniciativas y pasos a lo largo de los últimos decenios.
Las grandes reformas a nivel político, económico y social que ha conocido Marruecos están evidentemente a la base, primero, de las grandes transformaciones de la sociedad así como de los éxitos organizacionales y han ido dando frutos en todos los niveles. Se añade a ello los logros espectaculares manifestados en la realización de obras colosales estructurales a nivel de la infraestructura nacional o a nivel del propio deporte, tras haber llegado la selección de nuestro país a los semifinales de la última Copa del Mundo de Catar 2022.
La Copa del Mundo será para Marruecos otra oportunidad para confirmar que nuestro país posee un potencial humano y material de organizar, al igual que las grandes naciones de este mundo, eventos considerados de suma importancia para la humanidad. Pero también serán siete años de grandes ilusiones y expectativas para todos los marroquíes. Años de grandes oportunidades para un auténtico arranque del que no se puede volver atrás. España hizo lo mismo con motivo del mundial de 1982 que coincidió con las terceras elecciones de la España democrática.
Consecuentemente, la Copa del Mundo de Fútbol Masculino es para Marruecos una cita y un recorrido. Un gran y largo recorrido de grandes chantiers que afectarán todos los aspectos y áreas, que culminarán con los espectáculos que ofrecerán los equipos que disputarán sus partidos en los estadios de Marruecos.
Se espera entonces la rehabilitación de nuestras infraestructuras y la creación de otras. Se extenderán las líneas ferroviarias hasta zonas más inesperadas y el tren de alta velocidad llegará a Marrakech, Agadir y probablemente a otras ciudades. Reducirá entonces las distancias y acortará el tiempo entre las ciudades y regiones de Marruecos, pero sobre todo entre España, Portugal y Marruecos.
Basta con cruzar el estrecho en unos treinta minutos para sentirse más cerca de los estadios. Facilitará la fluidez de los aficionados dentro de Marruecos y entre Marruecos y la Península Ibérica. Se reforzarán también los ya existentes vuelos de bajo coste y de grandes compañías aéreas nacionales e internacionales. Se consolidará a Marruecos como destinación turística preferida.
Marruecos tiene y puede estar a la altura de las aspiraciones de la comunidad internacional y también de los propios ciudadanos. Marruecos sabrá llevar y llegar a buen puerto este gran desafío. Los siete años serán más que suficientes para hacer progresos extraordinarios y espectaculares en materia de formación y cualificación del factor humano. Será nuestro gran capital para el futuro.
Mantener y consolidar los logros ya realizados, pero innovar e invertir en los nuevos métodos de formación basándose en las nuevas tecnologías y por qué no en la inteligencia artificial. Hacer de la Marca Humana Marroquí una referencia internacional tiene que ser uno de los retos y objetivos a realizar a medio plazo. Ello requiere, por supuesto, adoptar estrategias eficientes para cambiar las mentalidades que todavía nos quieren arrastrar hacia atrás o aquellas que todavía no están convencidas del desarrollo.
Hay que hacer de la Copa del Mundo un buen motivo para un nuevo arranque económico y social. Aspirar a una justicia social pasa por lograr una regionalización solidaria, eso es, obrar por hacer beneficiar a todas las regiones de Marruecos de los grandes proyectos y las grandes obras que pronto empezarán, nadie se tiene que sentir excluido o fuera de esta manifestación internacional. Queremos que sea no solo un éxito organizacional, porque de esto estoy seguro y tengo confianza en las capacidades organizacionales de Marruecos, sino también y sobre todo una fiesta que se viva y sienta tanto por el público y la ciudadanía como por los aficionados y turistas que se desplazarán a nuestro país.
La Copa del Mundo de fútbol masculino de 2030 tiene que jugarse bajo el lema de la tolerancia, el diálogo, la solidaridad y la unión. Es la copa de dos continentes, dos continentes viejos que han compartido mucha historia entorno al Mediterráneo. Tres países amigos representativos de esa cercanía y convivencia pacífica durante muchos años. Tiene que ser entonces, la copa de la transmisión de los valores que han reinado desde muy remoto en esta zona tan crucial para dos continentes y el resto del universo.
Las tres tierras serán, sin duda y de nuevo, tierras de reconciliación de las civilizaciones, lenguas, culturas y religiones; tierras de convivencia pacífica, de hospitalidad humana y de descubrimiento y conocimiento directo y natural entre todos.
● Catedrático y cuentista
Marruecos trabaja en silencio y deja su exito hacer ruido 👍👍🙏 forza marruecos 🇲🇦 y gracias prof Abderahman por su escrito 👍
Me es grato felicitarte estimado profesor por la labor que desarrollas tratando la actualidad de nuestro querido país. Es de señalar que el artículo resalta los enormes esfuerzos invertidos por parte de Marruecos para salir adelante y franquear el camino hacia el desarrollo. Es un artículo con una dosis de mucho optimismo. Felicidades!!