Rue20 Español/ Rabat
La Cámara de Representantes clausuró, ayer lunes, la segunda sesión del año legislativo 2022-2023 de la undécima legislatura (2021-2026).
Interviniendo en esta ocasión, el presidente de la Cámara de Representantes, Rachid Talbi El Alami, subrayó que el resultado de esta sesión legislativa ha sido marcado por el marco legislativo de las reformas, el seguimiento de la acción gubernamental y la evaluación de las políticas públicas, haciendo hincapié en las prioridades de la agenda nacional.
Refiriéndose al ámbito de la diplomacia parlamentaria y las relaciones exteriores, Talbi Alami explicó que la Cámara de Representantes había continuado su presencia activa e influyente en los foros parlamentarios multilaterales internacionales, continentales y regionales, con el objetivo de consolidar su enfoque proactivo e innovador en el tratamiento de los acontecimientos, las crisis y las cuestiones que afectan a las relaciones internacionales.
Tras destacar los importantes acontecimientos internacionales organizados por el Parlamento marroquí, Talbi El Alami subrayó la necesidad de recordar ciertas constantes que guían a la institución legislativa en el contexto actual, explicando que se trata de reiterar su rechazo categórico a las acusaciones que emanan de ciertas instituciones europeas, en particular del Parlamento Europeo, en forma de difamación y denigración de Marruecos.
Estas prácticas ocultan «el enfado de una parte del espectro político de esta institución ante los éxitos y la posición distinguida de nuestro país», sostuvo, subrayando la necesidad de diálogo con las autoridades políticas de esta institución, en un marco de respeto mutuo, igualdad, compromiso y honestidad.
Por otra parte, Talbi Alami señaló que la diversificación de las asociaciones de Marruecos y la garantía de sus intereses nacionales y opciones estratégicas constituyen «un derecho soberano inalienable», añadiendo que «el intento de encubrir la injerencia en nuestros asuntos internos mediante acusaciones flagrantes y la creación de crisis ya no es creíble para los políticos razonables y los miembros de la comunidad internacional».
El presidente de la Cámara de Representantes afirmó que «la causa nacional y toda posición relativa a ella constituye el principal criterio a tener en cuenta en nuestras relaciones internacionales», recordando que el Rey había afirmado que la cuestión del Sáhara es el prisma a través del cual Marruecos mira al mundo y la vara de medir la sinceridad de las amistades y la eficacia de las asociaciones que el Reino establece.
Talbi El Alami señaló, a este respecto, que la cuestión de la integridad territorial está y seguirá estando en el primer plano de la acción de la Cámara en materia de relaciones exteriores, añadiendo que «permaneceremos vigilantes en la defensa de esta causa y desmontando los relatos fabricados por los enemigos sobre la base del engaño y la tergiversación de los hechos históricos».
Subrayó, por otra parte, que una de las características más importantes del sistema constitucional e institucional marroquí es la participación y la consulta a través de la democracia participativa, asegurando que la Cámara de Representantes ha seguido abriéndose a las instancias de la sociedad civil mediante la organización de seminarios y reuniones temáticas y de formación, con la participación de decenas de organizaciones civiles de diversas regiones del Reino.