Rue20 Español/ París
El politólogo y escritor franco-suizo, Jean-Marie Heydt, ha denunciado el escándalo del «desvío sistemático» de las ayudas humanitarias destinadas a las poblaciones de los campamentos de Tinduf, que Marruecos denuncia desde hace años ante la comunidad internacional.
Este desvío ha sido confirmado de nuevo por el informe del Programa Mundial de Alimentos (PMA), en su evaluación del «programa estratégico por país Argelia 2019/2022», señala Heydt en un artículo publicado en «Maglor.fr», el medio de comunicación de los magrebíes del mundo.
El experto subraya que el PMA ha documentado de manera irrefutable el desvío y la venta de alimentos procedentes de la ayuda humanitaria en los mercados de la ciudad argelina de Tinduf, fuera de los campamentos, así como en los países vecinos, en un momento en que la población de los campamentos vive en condiciones indignas, marcadas por una desnutrición crónica, especialmente entre las mujeres y los niños.
Y lo que es más grave, el PMA ha vuelto a expresar su preocupación por la falta de registro y censo de la población en los campos de Tinduf y el potencial de desviación que esta situación única hace posible, argumenta Heydt, que también es investigador asociado en la Universidad de Alta Alsacia (Francia).
También se trata de una situación excepcional en el mundo desde el punto de vista del derecho internacional humanitario, en la medida en que durante casi 50 años estas poblaciones nunca han sido identificadas, registradas como refugiados ni censadas, lo que les ha privado de todos los derechos garantizados por la Convención de 28 de julio de 1951 sobre el Estatuto de los Refugiados, agrega el politólogo.
El informe señala también la imposibilidad de que las agencias especializadas de la ONU tengan acceso sin trabas a los campamentos, y califica de parcial el control interno de la distribución de la ayuda humanitaria que efectúa el «polisario», señala.
El experto concluye que Argelia tiene la responsabilidad jurídica, política, histórica y moral de comprometerse de buena fe en la búsqueda de una solución política definitiva a este diferendo regional que dura demasiado, conforme a las resoluciones del Consejo de Seguridad, y ello para permitir un retorno en dignidad de las poblaciones de los campamentos de Tinduf en el Sáhara marroquí.
