Rue20 Español/ Buenos Aires
La decisión de Bolivia de establecer relaciones con la pseudorepública proclamada por el polisario fue una decisión equivocada y el actual gobierno debe corregirla con urgencia, afirmó la parlamentaria boliviana, Tatiana Añez, de la coalición de la oposición «Creemos» que dirige el encarcelado gobernador de la región de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho.
«Llamamos al actual Gobierno que demuestre sabiduría y deje de inmiscuirse en los asuntos internos de los países; es importante respetar la soberanía de los Estados», declaró Añez en declaraciones al canal de noticias marroquí M24.
En este contexto, condenó la actuación del ex presidente boliviano, Evo Marales, que «no deja, según ella, de inmiscuirse en los asuntos internos del vecino Perú, lo que perjudica las relaciones entre ambos países y pueblos».
La diputada Añez indicó que la coalición a la que pertenece había saludado la decisión tomada en 2020 por la ex presidenta Jeanine Añez de suspender el reconocimiento de una pseudorepública y de «romper todo vínculo con esta entidad ficticia».
La posición de la ex presidenta fue muy preciada porque optó porque Bolivia mantenga relaciones con un país del tamaño del Reino de Marruecos y trabajó para expulsar de Bolivia a este grupo separatista que provoca malestar en el país y en toda la región.
La diputada Añez afirmó que «no hay duda de que debemos trabajar para fortalecer las relaciones con el Reino de Marruecos, porque son muy importantes y se inscriben en el marco del respeto de las decisiones apoyadas por la comunidad internacional».
En cuanto al papel de los parlamentarios bolivianos en este contexto, Añez declaró que «pretendemos hacer de las relaciones con Marruecos una prioridad y un tema crucial. También estamos trabajando para presentar peticiones escritas para que el gobierno boliviano nos explique en qué circunstancias decidió establecer este tipo de relaciones con una república fantasma».
La diputada boliviana subrayó que «el gobierno está obligado a informar a los representantes del pueblo boliviano sobre lo que hace este movimiento ilegal en nuestro país», cuestionando qué ganaría Bolivia estableciendo relaciones ilegales con una entidad que no reconocida internacionalmente.
Como parlamentarios, «estamos comprometidos con el respeto a la soberanía de los Estados», reiteró Añez, haciendo un llamamiento a la continuación del diálogo para lograr la aplicación de las resoluciones de la ONU para poner fin al conflicto regional sobre el Sáhara marroquí.