Rue20 Español/ Rabat
Entrevistado por Ismail El Khouaja
Una de las voces que no cesan de combatir los arcaicos prejuicios que todavía tienen los españoles sobre los musulmanes, en general, y los marroquíes, en particular. Su admiración por Marruecos y su gente, especialmente los residentes en Torre Pacheco, municipio donde nació, no le impide analizar y criticar varios asuntos que tratan la vecindad hispano-marroquí.
Paulino Ros, sociólogo y periodista, es autor del blog Islam en Murcia, así como de varios artículos y estudios que tratan el tema migratorio, siendo el último de los cuales Marroquíes que cambiaron Torre Pacheco en 40 años (1979-2019), una magnífica investigación para entender el papel de los marroquíes en la economía española.
En esta entrevista, Paulino Ros trata de resaltar los problemas que todavía sufren los marroquíes residentes en Murcia, el auge que conoce Marruecos a nivel futbolístico, el conflicto del Sáhara, entre otras cuestiones imprescindibles.
– “Marroquíes que cambiaron Torre Pacheco en 40 años”, ¿cómo surgió la idea de realizar este estudio y en qué consiste este cambio?
La idea surgió porque consideré necesario explicar con datos que la economía de este municipio se sostiene gracias a la mano de obra inmigrante, principalmente de origen marroquí.
Surgió porque estoy cansado de leer y escuchar todo tipo de comentarios racistas e islamófobos hacia marroquíes en Torre Pacheco, lo que me parece de lo más injusto, puesto que las personas que han llegado desde Marruecos han trabajado mucho y en condiciones muy penosas a veces para enriquecer este municipio. Hay que hacer un monumento al trabajador y a la trabajadora marroquí.
Los inmigrantes fueron responsables de que el Valor Añadido Bruto creciera un 35% entre 2005 y 2019, según una investigación del Consejo Económico y Social de la Región de Murcia.
– En cambio, ¿qué han recibido los marroquíes de todo esto?
Los marroquíes han recibido la posibilidad de ganarse la vida con su trabajo, de traer a su familia y ampliarla, de dar educación a sus hijos, de tener una sanidad pública de calidad a su disposición, de convertirse en ciudadanos de la Unión Europea, o de comprarse una casa.
De hecho, en la compra de viviendas por parte de extranjeros en la Región de Murcia, los marroquíes son los segundos que más casas adquieren. En 2022, según el Colegio de Registradores de España, los marroquíes compraron 807 casas en Murcia, el 18’86%. Solo los ingleses compraron más: 1.213, el 28’34%.
Esa es la parte positiva. La negativa es que los marroquíes disfrutan de todo eso teniendo que soportar odio, racismo, islamofobia, en diferentes ámbitos como el trabajo, la escuela, la universidad, la sanidad, las instituciones públicas, o los locales de ocio.
Por desgracia la “morofobia” está creciendo en España de la mano de los partidos de ultraderecha. El último ejemplo es el aluvión de insultos que ha recibido el candidato del PSOE a la alcaldía de Torre Pacheco, Carlos López, por colgar en sus redes sociales un video felicitando el Ramadán a los musulmanes del municipio, que son uno de cada cinco habitantes.
– ¿Ha cambiado el perfil de los migrantes a lo largo de estos cuarenta años?
El perfil de los que siguen viniendo a España de forma irregular no ha cambiado mucho, son personas que en su mayoría buscan trabajo. Es verdad que cada vez se hacen más contratos en origen en Marruecos gracias a acuerdos bilaterales, pero también lo es que son muchos los que se juegan la vida para emprender una nueva etapa en Europa.
Lo que ha cambiado es que hace 40 años llegaban mayoritariamente hombres solos a un lugar donde había muy pocos paisanos. Ahora hay más de 100.000 marroquíes en la Región de Murcia, familias que han visto nacer a sus hijos en esta tierra, por lo que quienes vienen se encuentran con más apoyo y con el camino más fácil de transitar que hace 40 años.
– En su estudio usted llega a la conclusión de que hay una islamofobia institucional que nace bien desde el colegio. Como sociólogo, ¿cómo analiza este fenómeno en pleno siglo XXI?
Es una desgracia que el ser humano sea tan dado al odio y la intolerancia hacia el prójimo. La falta de educación, la ignorancia, el desconocimiento de Marruecos que hay en España, y los prejuicios hacia el islam, son las causas de esa islamofobia que noto donde yo vivo.
El 25 de junio de 2025 se cumplirán 1200 años de la fundación de la ciudad de Murcia por parte de un musulmán, Abderramán II. En nuestra cultura, lenguaje, arquitectura, gastronomía y agricultura hay una evidente huella musulmana.
Todo eso se nos ha ocultado y sigue sin aparecer en los libros de texto, en Murcia y en España crecemos dando la espalda desde el colegio a ocho siglos de nuestra historia. En Murcia nació en 1165 el filósofo y sabio sufí más importante del mundo árabe: Ibn Arabi. En Murcia reinó un hombre que dominó Al Andalus desde esta ciudad en el siglo XII: Ibn Mardanis.
Apenas se reconoce esa historia y todavía hoy se falsea la realidad hablando de una “reconquista” de territorio español por parte de los Reyes Católicos en 1492, término inventado por el dictador Franco y hoy utilizado por el partido ultraderechista Vox, que hasta vemos validado en el diccionario de la Real Academia Española de la Lengua.
España no existía cuando llegaron los musulmanes, que algún día espero sean reconocidos como parte de nuestra identidad y no como un vacío en la historia.
– Algunos círculos mediáticos y partidos de la extrema y ultra derecha españoles no cesan de tergiversar la imagen del marroquí, ¿como periodista a cual atribuye esta rivalidad hacia un vecino y socio tan estratégico como es Marruecos?
Lo atribuyo en primer lugar al ansia de poder. El discurso contra la inmigración marroquí y contra Marruecos da votos, y los votos dan acceso al gobierno.
En segundo lugar, insisto, al desconocimiento total de nuestro país vecino. Los españoles deberían viajar mucho más, estamos muy cerca como para darnos la espalda e ignorar las inmensas posibilidades económicas, turísticas y culturales que ofrece Marruecos. De esa manera descubrirían lo mucho que tenemos en común. Yo en Marruecos me siento como en casa, mientras que en Francia, por ejemplo, soy un extranjero.
Los círculos mediáticos y partidos ultra de los que hablas son máquinas de fabricar bulos contra Marruecos que hacen mucho daño. Eso nos da mucho más trabajo a los periodistas, nuestra tarea es imprescindible para no perderse entre tanta falsedad interesada.
– Ahora que todo el mundo habla de Marruecos tras su gesta histórica en Qatar y su victoria ante Brasil, ¿este éxito a nivel futbolístico podría mejorar esta imagen?
Solo en lo deportivo, no en lo social. Es cierto que Marruecos ha maravillado a cualquier amante del buen fútbol en España, pero los prejuicios son tantos y están tan pegados al imaginario del español medio, que quitárselos de encima va a costar mucho.
El ejemplo lo tenemos en el empleado del hotel de Madrid que fue detenido por la policía por insultar a Marruecos y los musulmanes en su cuenta de Instagram. Por suerte, en España han mejorado mucho las leyes que van contra este tipo de personajes y la policía hace bien su trabajo. Ojalá se denunciara todo lo que ocurre cada día, todo el odio que se vierte en las redes sociales.
– Por historia, geografía y por razón también el Sahara ha sido, es y será marroquí. Usted es buen conocedor de este conflicto, ¿cómo analiza la actual situación del Polisario ahora que España apoya la marroquinidad del Sahara?
El Polisario es un juguete roto en manos de Argelia, es una organización terrorista con postulados desfasados e inútiles, liderada por un individuo, Brahim Gali, que sigue sin pagar por los 300 muertos españoles que provocó en los años 70 y 80, para humillación de sus familiares y para vergüenza de toda España.
No deberíamos olvidar tampoco las denuncias a Gali ante la justicia española por genocidio, torturas, detención ilegal y abusos sexuales presuntamente cometidos en los campamentos de refugiados.
Ni el Polisario, ni Argelia, ni el próximo gobierno de España si es que cambia de color, podrán evitar la relación de vecindad y amistad con Marruecos, porque es algo natural. Torcer lo que es natural traería graves consecuencias.
España ha tenido un presidente como Pedro Sánchez capaz de reunir el valor suficiente para decir lo que ya pensaban Zapatero y Rajoy sobre el Sáhara marroquí: «La propuesta marroquí de autonomía es la base más seria, creíble y realista».
Eso está permitiendo a Marruecos y España desarrollar una etapa de colaboración que da beneficios económicos a ambas partes. En enero de 2023 las exportaciones españolas a Marruecos crecieron un 18% y las importaciones un 5%, con respecto al año anterior.
España decidió dejar el Sáhara en manos de Marruecos en 1975, en un acuerdo irreversible que debería respetarse porque el Sáhara era de Marruecos mucho antes de que existiera la ONU.
¿Qué hizo Francia si no? Repartir su botín imperialista de Marruecos con España, bajo la estrecha vigilancia de los ingleses, dejándole a España el norte del país con Tetuán como capital del Protectorado, y el Sáhara en el sur, con capital en El Aaiún.
– Volviendo al tema, ¿Podría la nueva etapa hispano-marroquí mejorar la situación de los marroquíes en España?
Sin lugar a dudas, porque la relación entre ambas orillas va a más. Queda mucho trabajo por hacer a los dos gobiernos, pero se avanza en la buena dirección, y eso es bueno para todos los marroquíes y españoles.
Un ejemplo cercano es que los vuelos desde Murcia a Casablanca y Oujda van llenos de gente y de proyectos de vida ilusionantes, son los más rentables del nuevo Aeropuerto Internacional de la Región de Murcia.
Sueño con que algún día se una Argelia a Marruecos y España, porque Argelia es otro vecino de vital importancia. Sueño con que sus dirigentes abandonen aspiraciones imposibles y se sienten en una mesa con Marruecos, para resolver su agenda pendiente, comenzando por Tinduf.
