Rue20 Español/ Fez
Meryem Ghoua
Marruecos es un país excepcional gracias a su gente, su cultura, sus lugares turísticos, pero sobre todo gracias a su gastronomía.
La historia y la diversidad cultural de Marruecos son imprescindibles para entender el auge de la gastronomía marroquí.
Los bereberes, árabes, fenicios, romanos, franceses, españoles, etc., todos dejaron su impronta con diferentes costumbres culinarias y culturales que hoy podemos apreciar en cada mordisco.
Para muchos, lo más bonito de Marruecos es su gastronomía, sus sabores y sus aromas exóticos y, a la vez, muy familiares para un gran número de turistas, especialmente para los que vienen de la vecina del norte, España.
La Harira es una de las sopas más famosas de la gastronomía marroquí y una de las más populares y extendidas por todo Marruecos.
Se cree que la Harira pudo haberse gestado en Al-Ándalus durante la época en la que el sur de España estaba bajo dominio árabe, según afirma Turismo Marruecos.
Se dice también que la Harira forma parte de una antigua tradición, heredada de una sopa andaluza, la bufertuna (de buena fortuna o de buena suerte).
Harira es la sopa tradicional con la que se rompe el ayuno durante el mes sagrado Ramadán. Es decir, el denominador común en cuanto a los platos que dan fama a la mesa marroquí de Ramadán es la Harira y ésta suele ir acompañada de dátiles, Chabbakia y pequeños pasteles.
Ramadán
El calendario islámico es un calendario lunar, que depende de la visibilidad de la luna creciente. Por eso, en el día 29 de châabane, el mes anterior a ramadán, los musulmanes de todo el mundo vigilan el cielo en busca del hilal (la luna creciente). Si lo ven, el ramadán comienza el día siguiente. De lo contrario, el mes de ayuno comienza 2 días después y dura 30 días.
«El ramadán es uno de los cinco pilares del islam. Se trata de un período de reflexión durante el cual los musulmanes no pueden comer, beber, fumar o tener relaciones sexuales desde el amanecer hasta el atardecer», dijo 196flavors.
A lo largo de este mes sagrado, los musulmanes rezan más y se centran en cómo desarrollar sus cualidades humanas como la paciencia, la bondad, la compasión y la humildad.
En el atardecer, los musulmanes se reúnen con sus familias para disfrutar del Ftour, la comida con la que se rompe el ayuno. Una horas después se lleva a cabo otra comida llamada el “Al h’chaa” y antes del amanecer existe otra comida llamada el “S’Hour”.
Marruecos es una locura de sabores. La comida, en Marruecos, es un símbolo de identidad reflejada en la elaboración de sus platos y está inscrita en el listado del Patrimonio Inmaterial de la UNESCO.
