Rue20 Español/ Londres
Marruecos debe adaptar su economía para hacer frente a la creciente amenaza del cambio climático que provoca sequías cada vez más frecuentes, declaró la ministra de Economía y Finanzas, Nadia Fettah Alaoui.
En declaraciones a la edición dominical del Financial Times, Fettah Alaoui señaló que durante muchos años «hemos hablado de la sequía como una excepción», y añadió que «2022 fue el año en que decidimos que no necesitábamos planes de acción para años concretos, sino una visión a largo plazo».
Alaoui afirmó que el cambio climático exigirá acelerar las inversiones en plantas desalinizadoras, presas y sistemas de reciclaje de agua.
«Queremos que la desalinización se haga a través de asociaciones público-privadas», dijo, señalando que se subvencionará el coste del agua para los hogares, mientras que la industria y otros grandes usuarios pagarán un «precio justo».
Citado en el mismo artículo, Youssef Brouziyne, responsable de Oriente Medio y Norte de África en el Instituto Internacional de Gestión del Agua, afirmó que 2022 fue «muy difícil porque fue el cuarto año seco consecutivo», lo que agotó embalses vitales. Añadió que los estudios climáticos sugieren que Marruecos y su región se enfrentan a sequías más regulares y a una escasez de agua más frecuente e intensa.
