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Marruecos ha dejado de sellar el pasaporte a ciudadanos españoles, trabajadores transfronterizos y residentes en la ciudad ocupada de Melilla, poniendo fin a una medida obligatoria desde la reapertura fronteriza el 17 de mayo de 2022.
La Delegación del Gobierno en Melilla ha confirmado que la eliminación de esta obligación se produjo en la tarde de este miércoles, tal y como han constatado las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en el paso fronterizo de Beni-Enzar, según EFE.
El presidente de Melilla, Eduardo de Castro, ha supuesto que el hecho de que ya no haya que sellar el pasaporte en el lado marroquí dará más agilidad al tránsito fronterizo.
Fuentes de la ONG Gran Rif señalaron en declaraciones a El Faro de Melilla que no se elimina el control de pasaportes, sino el acto del sellado porque se daba la circunstancia de que muchos transfronterizos tenían que renovar el pasaporte continuamente porque se les acababa el espacio con tanto sello, al tener que entrar y salir a diario de la ciudad ocupada de Melilla.