Rue20 Español/ Rabat
La Asamblea Parlamentaria del Mediterráneo (APM), que reúne a los países euromediterráneos y del Golfo, está llamada a adoptar «un enfoque renovado y explorar nuevos horizontes de cooperación en sintonía con los cambios geopolíticos», dado el turbulento contexto regional marcado por desafíos multidimensionales, afirmó, el miércoles en Rabat, el presidente de la Cámara de Consejeros, Enaam Mayara.
Presidiendo la sesión de apertura de la 17ª sesión de la APM, organizada por el Parlamento marroquí, Mayara señaló que este enfoque debe basarse en «una voluntad común de dar un fuerte impulso a relaciones que reflejan la ambición de promover una nueva asociación y un diálogo político que tenga en cuenta la evolución de la zona euromediterránea, en el respeto de los intereses estratégicos de todos nuestros países y en el marco de un sistema multilateral basado en la claridad, el equilibrio y la justicia, lejos de dobles raseros y de la tutela sobre cuestiones universales conocidas».
Esta organización parlamentaria también está llamada a trabajar por la adopción de un nuevo modelo de asociación entre las dos orillas del Mediterráneo «que tenga en cuenta la extensión africana y las cuestiones y los desafíos comunes que van más allá del área geográfica mediterránea, como la lucha contra el tráfico de seres humanos, el terrorismo, la seguridad, el extremismo y la migración», añadió.
Mayara destacó también, en este sentido, el compromiso de Marruecos con el espíritu de solidaridad en el intercambio de experiencia con los países del Sur, precisando que el Reino es un puente entre África y los países mediterráneos.
En la misma línea, el presidente de la Cámara de Consejeros llamó la atención sobre las tensiones crecientes y las guerras por delegación que amenazan la estabilidad y la seguridad de la región mediterránea, así como sobre la amenaza terrorista, cada vez más peligrosa, dado que la región se extiende hasta la zona del Sahel, caldo de cultivo del extremismo, el terrorismo y el crimen organizado.
Destacó, a este respecto, que Marruecos es un actor activo en el ámbito de la seguridad y la estabilidad regionales en el África subsahariana y el Mediterráneo, agregando que el Reino, bajo el liderazgo de SM el Rey Mohammed VI, siempre se ha preocupado, como país ribereño tanto del Mediterráneo como del Océano Atlántico, de ser una palanca de paz en su región y un vínculo entre regiones.
Mayara también evocó los retos de la delicada y compleja situación que atraviesa actualmente el mundo, marcada por transformaciones regionales e internacionales y desafíos entrelazados y multidimensionales.