Rue20 Español/ Rabat
El ministro del Interior francés, Gérald Darmanin, avisó el 2 del pasado septiembre que el imán marroquí Hassan Iquioussen «será detenido y expulsado».
El ministro francés se mostró convencido, en una entrevista con el canal BFM TV, de que el imán Hassan Iquioussen será expulsado a Marruecos. Y así fue en la últimas horas, aunque el imán fue expulsado desde Bélgica y no Francia.
El Gobierno francés adoptó la decisión de expulsar al imán por supuesto radicalismo. El imán estaba en busca y captura en las últimas semanas tras su huida a Bélgica.
Hassan Iquioussen aterrizó ayer viernes en el aeropuerto Mohamed V de Casablanca tras ser expulsado de Bélgica, donde se encontraba después de haberse escapado este verano del territorio francés para librarse de otra orden de expulsión del país galo, según informó también EFE.
El imán, de 58 años, llegó y salió con normalidad del aeropuerto. No ha sido detenido porque no tiene ninguna causa pendiente en este país, dijo un fuente gubernamental marroquí a EFE.
La secretaria de Estado belga de Asilo e Migración, Nicole de Moor, anunció en un comunicado relativo a Iquioussen que su Gobierno no puede permitir que «un extremista» deambule por Bélgica y que cualquiera que no tenga derecho a estar (en el país) debe ser «enviado de vuelta”.
La expulsión del imán marroquí se produce tras la emisión este jueves de un salvoconducto por parte de las autoridades de Marruecos, indicó su abogada, Lucie Simón.
