Rue20 Español/ Rabat
La Audiencia Nacional ha dado vía libre a la petición de Marruecos de extraditar a un ciudadano de este país al que se acusa de haber organizado desde Canarias el envío de importantes cantidades de hachís con destino a Tenerife y Gran Canaria.
En total se le atribuye el traslado de, al menos, cuatro partidas que oscilaban entre los 300 y los 400 kilos desde los años 2015 a 2019.
Este ciudadano marroquí fue detenido el pasado año en Marbella ante la existencia de una orden internacional emitida desde Marruecos y permanece ahora en libertad provisional pendiente de que se enfrente a dos procedimientos judiciales, uno en Tenerife y otro en Gran Canaria.
Los supuestos delitos que se le atribuyen son su participación en tráfico de drogas, transporte y exportación de mercancía prohibida a través de la aduana sin declarar ni contar con autorización.
En caso de demostrarse estos hechos el acusado podría enfrentarse en Marruecos a penas de privación de libertad de hasta 13 años.
En la relación de las acusaciones que fundamentan la petición de extradición se indica que formaba parte de una banda especializada en el tráfico internacional de estupefacientes.
Tras ser detenido otro ciudadano marroquí en 2020, éste confesó que el acusado contactó con él desde Canarias para realizar una primera operación en 2015 que consistió en el transporte de 400 kilos de droga a Tenerife, por lo que cobró unos 2.300 euros.
A mediados del año siguiente el imputado pendiente de extraditar le habría propuesto participar también en el traslado a Canarias de la misma cantidad de hachís, por lo que percibió esta vez 2.800 euros, mientras que el imputado dirigía la operación desde Canarias.
Hubo una tercera remesa de 300 kilos en 2016, en el transcurso de la cual las autoridades españolas detuvieron al que ya era considerado el cabecilla de la banda y que quedaría en libertad en 2019.
Nada más salir de prisión organizaría otra operación de 400 kilos utilizando lanchas neumáticas que partieron desde El Aaiún y llegarían a Tenerife.
Entre las razones que el abogado defensor plantea para evitar la extradición está, precisamente, que en la actualidad existen dos causas penales pendientes en los juzgados de Tenerife y en Las Palmas de Gran Canaria.
En el primer caso se trata de un procedimiento abierto a raíz de la supuesta entrada de una partida de droga en 2015 en Tenerife que no fue aprehendida y otra más en ese año que llegó a Adeje en 26 fardos que sumaron 782 kilos.
En Gran Canaria se encuentra acusado por otro delito contra la salud pública por supuestamente haber introducido en julio de 2018 por la playa de Veneguera, en Mogán, casi 1.500 kilos.
La respuesta de la Audiencia Nacional, sin embargo, es que no se pueden relacionar estas operaciones ilícitas con las que investiga Marruecos y tampoco se considera que sean cosas juzgadas, al no haber sido enjuiciadas ni declarada una sentencia firme.
El abogado defensor plantea que el relato de los hechos es escueto e inconcreto, lo que impide determinar con exactitud su tipo penal y que según la legislación marroquí los hechos supuestamente cometidos se encuentran prescritos, al menos, los que se refieren a los cometidos en 2015 y 2016.
Pese a estos argumentos la Audiencia Nacional ha trasladado ahora al Consejo de Ministros la decisión final. EFE