Rue20 Español/ Mohammedia
Entrevistado por T. Slimani y M. Charbi
Quiso respirar su libertad pensando en los demás. Quiso respirar su libertad para poder gritar y defender la mejor opción para los saharauis. Optó por el plan de Autonomía para el Sáhara porque es la mejor apuesta para recuperar la libertad perdida en los campamentos de Tinduf.
Así es Mustapha Salma Ould Sidi Mouloud, activista saharaui y ex miembro del Frente Polisario. Sus convicciones personales le causaron muchos problemas. No quiso abandonar los campamentos de Tinduf, por su creencia en la lucha por empujar desde dentro al Frente Polisario a abrirse a la propuesta marroquí basada en la autonomía.
La dirección del Polisario trató de silenciarlo, pero no pudo, por lo que fue expulsado por la fuerza después de un período de detención y desaparición que duró 70 días debido a su abierto apoyo a la autonomía como una solución adecuada al conflicto del Sáhara.
En esta entrevista concedida al diario marroquí Rue20 Español, Mustapha Salma analiza la nueva decisión española de respaldar el Plan de Autonomía, la nueva Resolución del Consejo de Seguridad, el discurso real de la Marcha Verde, la tensión silenciosa actual franco-marroquí y la decadencia del Polisario.
1- No cabe duda de que Marruecos ha conseguido grandes logros diplomáticos desde 2017, especialmente tras la decisión de Estados Unidos de América, España y Alemania de apoyar al Sáhara marroquí, amén de la reciente resolución positiva del Consejo de Seguridad. Además, las regiones del sur están experimentando un gran desarrollo y evolución. Tal como indicó el último discurso real con motivo del aniversario de la Marcha Verde. ¿Cómo ha leído el Discurso Real y qué novedad hay en él?
Los discursos reales anteriores se referían a menudo, explícita o implícitamente, a la evidencia de la marroquinidad del Sáhara y a los puntos fuertes de Marruecos en el expediente de este conflicto. Pero el tono cambió en el último Discurso, que no hizo ninguna referencia a la disputa por el Sáhara. El Discurso Real con motivo del aniversario de la Marcha, que es una ocasión especial para el Sáhara, se limitó a destacar los aspectos de desarrollo que incumben a la población y a la región en su conjunto, especialmente a África Occidental.
El discurso de Marruecos dejó de mencionar (en esta ocasión) los aspectos políticos del conflicto centrándose únicamente en el aspecto de desarrollo y en la relación de Marruecos con su profundidad africana, que considera al Sáhara su principal puente, por el importante y gran acontecimiento ocurrido hace dos años en la zona de Guerguerat, cuando Marruecos pudo asegurar el paso de modo que sus fronteras quedaron legalmente conectadas con la profundidad de África por primera vez desde la época precolonial, lo que se consideró como la madre de los logros.
«Asegurar la zona de Guerguerat liberó no sólo a Marruecos, sino incluso a todos sus socios, incluidos aquellos que estaban atados por el acuerdo de alto el fuego firmado con Naciones Unidas en 1991, que convertía el muro de seguridad en las fronteras de la soberanía marroquí efectiva».
La zona de amortiguamiento separaba a Marruecos de África, y lo demostraba como una isla aislada en el rincón del noroeste de África, separado por el mar del norte y del oeste, y separado por la zona de amortiguamiento de África en el sur, y de Argelia, que cierra sus fronteras aislándolo de su profundidad árabe en el oriente.
Por tanto, Marruecos antes del 13 de noviembre de 2020 no es el Marruecos de hoy. Así quedó reflejado en el reciente Discurso Real hablando del Sáhara en desarrollo, como la puerta de Marruecos hacia África a través de proyectos prometedores: la autopista, el puerto atlántico de Dajla y el gasoducto que unirá a los países de África Occidental y Europa.
2- ¿Cómo repercutirán todas estas acumulaciones en la cuestión del Sáhara tanto en el interior como en el exterior?
En el interior, solo falta poner el foco en la buena gobernanza y la lucha contra la corrupción con el fin de racionalizar los recursos para que la realidad esté en consonancia con la ambición ante una crisis económica que afecta a todo el mundo.
Y terminar también todos los proyectos incluidos en el programa de desarrollo del Sáhara lanzado por Su Majestad el Rey desde 2015, que harán del Sáhara un verdadero polo económico que responda a las aspiraciones de su juventud y a las de los pueblos de la región para la integración, así como los principales socios internacionales de África.
Además de la autopista que unirá Europa con África a través del Sahara, está el Puerto Atlántico de Dajla, que promoverá el comercio internacional con el conjunto de África Occidental, ya sea de Europa en el Norte o América en el Oeste, entre otras potencias económicas globales.
3- ¿Qué impacto tendrá el apoyo de España a la marroquinidad del Sáhara en el futuro del conflicto a corto y medio plazo?
Uno de sus impactos es que el Frente Polisario, a día de hoy, sigue considerando a España como una fuerza gestora de la región, según se repite en los discursos de los políticos del Polisario. Y si esta fuerza, considerada por los opositores como gestora, se inclina por la propuesta marroquí y la considera la más adecuada para solucionar el diferendo, entonces esto es una gran frustración para ellos.
Además, todo el mundo sabe que España es la antigua colonizadora de la región durante casi un siglo y es la que más conoce sus detalles y hay más intereses que le vinculan con la región a nivel cultural, económico y geográfico.
Esto anima a aquellos que tienen mucha o poca vinculación con Argelia a adoptar el mismo enfoque español. Y lo mismo con respecto al reconocimiento estadounidense, ya que animó a muchos países a apoyar la propuesta marroquí.
4- Cuanto más cerca está Marruecos de América y España, más se aleja Francia de Rabat, y quizás el acercamiento entre Marruecos y Alemania haya aumentado la brecha franco-marroquí. ¿Es posible anticipar una posición francesa que siga el ejemplo de Washington, Berlín y Madrid?
«El problema de Francia no se limita solo a Marruecos. Quedó claro que la política francesa necesita muchas revisiones; de lo contrario, se quedaría sin aliados ni amigos en África».
«Francia aún no ha entendido que África ha cambiado. Éste es su error. Si Francia no se libera de la mentalidad de hegemonía heredada del colonialismo, perderá todos sus intereses en África».
Ciertamente, asistiremos a una postura francesa más clara hacia Marruecos en los próximos días, después de que Francia supere su crisis interna por las repercusiones de la guerra de Ucrania.
Francia es quien necesita a África para que sus intereses no se pierdan después de que África se haya liberado y haya comenzado a pensar, buscar y trabajar para diversificar sus asociaciones.
Marruecos tiene todas las potencialidades para ser la primera línea estratégica de Francia en África, y ambas partes son conscientes de ello. Marruecos no está en una posición de debilidad, a todas luces, para pedir la posición francesa, especialmente en lo que se refiere al conflicto del Sáhara.
5- Lo normal es que Europa trabaje en buscar una alternativa al gas ruso y argelino. Por tanto, la apuesta de Europa por un gasoducto Nigeria-España a través de Marruecos viene a verse libre del chantaje de Argelia y Rusia. Pero esto puede haber generado dos alianzas europeas: la primera alianza liderada por Alemania y España apuesta por el gasoducto Nigeria-Marruecos, y la segunda alianza liderada por Italia y Francia apuesta por el gasoducto Nigeria-Argelia. ¿Se puede decir que el Discurso Real hace alusión a Europa, que también puede beneficiarse del gasoducto Nigeria-Marruecos?
El juego del gato y el ratón con respecto al gasoducto de Nigeria aún no está claro. Como hemos observado, el Discurso Real mencionó las ventajas del gasoducto Nigeriano-Marroquí para 13 países africanos por los que pasará y para más de 400 millones de africanos cuyas economías se beneficiarán de este proyecto, luego vino la referencia al paso de gas a Europa en segundo lugar.
Es un profundo pensamiento estratégico de los líderes africanos interesados en el proyecto, encabezados por Su Majestad el Rey Mohammed VI, que piensan primero en los intereses del pueblo africano.
La necesidad de todos esos países del gasoducto (consumo o exportación) es una necesidad estratégica ante la ausencia de alternativas menos costosas, a diferencia de la necesidad de Europa, que puede cambiar en cualquier momento según el cambio de sus intereses como resultado de la multiplicidad de fuentes de energía.
Si el proyecto tiene en cuenta las necesidades de la parte europea en primer lugar, el gasoducto desde Argelia es más corto y menos costoso. Pero la visión de Marruecos y Nigeria es más profunda que la de Argelia, el país exportador de gas.
El gas de Nigeria para Argelia es una cosa secundaria, mientras que para los países de África Occidental es una necesidad estratégica que no se ve afectada por los cambios en las condiciones económicas o geopolíticas.
6- ¿Asistimos al fin del Frente Polisario, especialmente después de la reciente resolución del Consejo de Seguridad?
El problema del Frente Polisario no es con el Consejo de Seguridad, sino que con su proyecto limitado, que ya no convence a sus supuestos militantes, y más bien a otros.
El proyecto del Polisario se basa en la liberación, que es una meta imposible a todas luces, y es un sueño que nunca se hará realidad.
Por lo tanto, si el Polisario, o más bien Argelia, no cambia su visión sobre la solución, estará condenado a una muerte paulatina, como está ocurriendo ahora.
7- ¿Qué papel pueden jugar algunas organizaciones saharauis que se oponen al Polisario, como Saharauis por la Paz, para encontrar una solución al conflicto en el marco de la autonomía?
Prácticamente, la solución existe, y lo único que falta es involucrarse en ella y sentarse a discutir. La comunidad internacional ha confirmado que la independencia es una solución que carece de realismo, y esto se evidenció en su exclusión de la opción del referéndum como mecanismo de autodeterminación, en cambio, consolida su énfasis en la seriedad, credibilidad y realismo de la propuesta de autonomía.
Marruecos, tras la operación de seguridad en Guerguerat a finales de 2020, se ha vuelto completamente tranquilo y cómodo, ya que sus fronteras conectaron con su profundidad africana, y del Sáhara no quedaron sino sus partes orientales, que no constituyen una importancia estratégica para Marruecos, ni una amenaza a su seguridad tras confirmar su control técnico y aéreo sobre Sáhara a través de radares y drones.
Solo falta la existencia de un socio político para hacer las paces y acabar con el problema. El apoyo de Argelia al Polisario todavía lo impide.
Esto requiere que los intelectuales saharauis, en el Movimiento Saharaui por la Paz y otros, alcen más sus voces para que puedan disfrutar de la paz y para que sus hijos se beneficien de las oportunidades de desarrollo perdidas. También requiere de mediadores internacionales para ampliar la base de participación en las negociaciones para incluir a todos los saharauis, especialmente con la presencia de muchas voces saharauis que expresaron su rechazo a la continuación de su sufrimiento causado por la terquedad de Argelia.
La gran responsabilidad en este aspecto recae sobre los saharauis, ya que son ellos las primeras víctimas y partes interesadas, y no los países donde todo está avanzando con normalidad.
8- En cuanto a Mauritania, vemos que está trabajando para satisfacer tanto a Marruecos como a Argelia. Pero eso no ayuda a resolver el conflicto. ¿Podemos ver una posición mauritana más atrevida que se alinee con los intereses vitales que le unen a Marruecos?
Mauritania es el eslabón más débil entre Marruecos y Argelia y no quiere perjudicar sus intereses con ninguna de las partes, por lo que se adhiere al principio de neutralidad y de interacción positiva con todas las partes.
Incluso las partes en conflicto entienden y toman en consideración los temores y preocupaciones de Mauritania. Por ejemplo, Mauritania es el único país que reconoce la República Saharaui pero nunca se ha izado la bandera del Polisario en su territorio ni alberga ninguna representación política del Polisario.
Creo que mientras haya el desacuerdo y conflicto entre Marruecos y Argelia, la posición de Mauritania seguirá dependiendo de la normalización de las relaciones entre Marruecos y Argelia, y Mauritania no dará ningún paso que pueda ser interpretado, por uno de los dos vecinos, como una provocación.
