Rue20 Español/ Rabat
El Gobierno español considera que se están cumpliendo «todos los puntos» de la declaración conjunta con Marruecos del 7 de abril pasado y señala que, en lo que va de año, la inmigración irregular que llega a las islas atlánticas de Canarias se ha reducido un 15 % respecto a igual periodo de 2021.
Durante un foro en la ciudad canaria de Santa Cruz de Tenerife, el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, subrayó que también ha bajado la presión migratoria en las ciudades norteafricanas de Ceuta y Melilla (fronterizas con Marruecos) y en las costas españolas del Mediterráneo, mientras que en el resto de Europa aumenta y en los Balcanes se ha triplicado, explicó.
En ese ambiente de buenas relaciones, Albares mencionó que el presidente de la región insular española de Canarias, Ángel Víctor Torres, viajará próximamente a Marruecos al frente de una delegación comercial.
«Queremos una relación con Marruecos como con todos nuestros vecinos», subrayó Albares, y lo resumió en los principios de respeto mutuo, beneficio mutuo, ausencia de acciones unilaterales y no meterse en asuntos internos.
Desde abril, cuando el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, firmó en Rabat esa declaración bilateral, se han reabierto los pasos fronterizos con Ceuta y Melilla, se ha retomado la conectividad aérea y marítima totalmente y se ha incrementado la colaboración en materia migratoria y de lucha contra las mafias que trafican con personas, enumeró Albares.
Otra consecuencia es que se ha relanzado el comercio bilateral, que alcanza un valor de 7.000 millones de euros en lo que va de año, 2.000 millones más que el año pasado, incidió el ministro.
Sánchez viajó a Rabat invitado por el rey Mohamed VI de Marruecos después de que en marzo pasara a apoyar el plan marroquí de autonomía para la antigua provincia española del Sáhara.
Las relaciones entre los dos países habían pasado por una crisis profunda desde abril de 2021, cuando las autoridades españolas permitieron que el líder independentista saharaui, Brahim Gali recibiera atención hospitalaria en España. EFE
