Rue20 Español/ Rabat
El enviado personal de la ONU para el Sáhara Occidental, el diplomático italiano Staffan de Mistura, abordó este sábado el estancado proceso político con la delegación negociadora del Frente Polisario, en su primer día de visita en los campamentos saharauis, en Argelia.
El diplomático italosueco llegó a Tinduf esta madrugada e inició hoy su agenda, marcada por los encuentros con la sociedad civil y que concluirá mañana domingo con una reunión con el líder del Frente Polisario, Brahim Gali.
El responsable negociador de la delegación saharaui, Jatri Aduh, lideró el encuentro con el que De Mistura trata de profundizar en las «consultas con todas las partes», con vistas a su intervención en el próximo Consejo de Seguridad en octubre.
El objetivo de esta segunda visita, tras la que realizó el pasado mes de enero, pretende tratar formas de reactivar un eventual proceso de paz para el Sáhara, tras el colapso del alto el fuego en noviembre de 2020 entre Marruecos y el Polisario.
El pasado mes de julio, De Mistura visitó Rabat, sin que trascendiera información oficial sobre sus reuniones, y canceló una primera visita al Sáhara.
De Mistura mantuvo este sábado también una reunión con un grupo de mujeres lideradas por Chaba Seini, secretaria general de la Unión Nacional de Mujeres Saharauis, y por la tarde completará la agenda con encuentros con jóvenes de los campamentos de refugiados.
«Solo le pedimos a la ONU que pueda organizar un día de democracia y nos pueda permitir expresarnos a través de un referendo», aseguró Chaba a Efe que le transmitió a De Mistura en la reunión de hoy.
La actual visita no forma parte de una gira por la región, como suelen hacer los delegados internacionales, por lo que no hay previstos contactos con Argelia o Mauritania, y se concentrará en los campamentos saharauis de Tinduf.
Rabat propone un estatuto de autonomía para la zona, dentro de las fronteras de Marruecos, mientras que el Polisario exige un referéndum de autodeterminación para optar entre la independencia o la integración en las fronteras marroquíes.EFE