Rue20 Español/ Rabat
Túnez negó este martes que mantenga intercambios comerciales con Israel y aseguró que seguirá sancionando a aquellas empresas que permitan la entrada de productos de ese país dentro de la campaña de boicot decidida por la Liga Árabe.
«Contrariamente a lo que circulan en algunos informes y sitios web de noticias sobre la existencia de intercambios comerciales entre la República de Túnez y la entidad sionista (…) está prohibido tratar con empresas y medios de transporte extranjeros que se demuestre que violan los principios y disposiciones del boicot contra Israel por decisión del consejo de la Liga Árabe», señaló el Ministerio de Comercio tunecino en un comunicado.
En los últimos días, la prensa local publicó una información en la que aseguraba que las exportaciones de Túnez hacia Israel aumentaron considerablemente el pasado año hasta alcanzar los 28,5 millones de dólares- principalmente del sector textil-, según la base de datos sobre estadísticas comerciales de Naciones Unidas Comtrade.
Después de que Emiratos Árabes restableciera sus relaciones diplomáticas con Israel en septiembre de 2020 con la firma de los Acuerdos de Abraham- a los que se sumaron más tarde Baréin, Marruecos y Sudán-, algunos analistas aseguran que Túnez podría ser el próximo país en cambiar su política motivado por sus deudas financieras.
Sin embargo, el presidente tunecino, Kais Said, que hizo de la causa palestina uno de sus eslóganes de campaña electoral en 2019, ha calificado esta decisión de «alta traición».
«No creo que sea algo normal cuando niegas a un pueblo su pleno derecho a su tierra y sus lugares sagrados y niegas reconocer a toda una nación su derecho a Palestina, a la ciudad santa de Jerusalén y a la mezquita de Al Aqsa», declaró el pasado año el mandatario en una entrevista concedida a la cadena de información France 24.
A principios de agosto, con motivo del nombramiento del nuevo embajador de Estados Unidos, Joey Hood, la poderosa central sindical UGTT denunció que la diplomacia estadounidense busca «imponer la normalización» con Israel después de que el diplomático asegurase que los «históricos» acuerdos de Abraham ofrecieron seguridad y mejores oportunidades económicas a los firmantes.
Como consecuencia, varias organizaciones nacionales pidieron al presidente retirarle las credenciales. EFE