Rue20 Español/ Rabat
El organismo estadístico marroquí Alto Comisariado de Planificación (HCP) estimó hoy que el crecimiento del PIB nacional se ralentizará al 1,3 % en 2022 (frente a 7,9 % el año pasado) a causa de la sequía y los efectos de la guerra de Ucrania.
En sus últimas previsiones presentadas hoy en una rueda de prensa en Rabat, HCP señaló que la contribución del PIB agrícola bajó un 13,5 %, por lo que la producción cereal se situará en 3,2 millones de toneladas, con una disminución del 69 % en comparación con el año pasado.
El jefe del organismo estadístico, Ahmed Lahlimi, lamentó hoy la fuerte dependencia de la economía del país a los cambios climáticos y las precipitaciones, al tiempo que llamó al gobierno a una revisión de la política agrícola y poner más el acento en proteger la actividad de los pequeños agricultores.
«Nuestra política agrícola debe dar más interés al pequeño agricultor en este contexto de choque climático que vivimos con la sequía que se ha convertido en algo estructural», subrayó Lahlimi.
El jefe del organismo estadístico marroquí advirtió del gran nivel de incertidumbre que envuelve la coyuntura económica debido a una sucesión de crisis desde 2020, con la pandemia covid-19 hasta la guerra en Ucrania que causó altos niveles de inflación y subida general de los precios.
En este sentido Lahlimi lamentó que Marruecos perdió el equivalente de dos años y medio de crecimiento en los últimos tres años, y el equivalente de tres años de lucha contra la pobreza.
Asimismo, el responsable marroquí deploró que el país haya retrocedido casi diecinueve años en la lucha contra las desigualdades sociales.
«El índice Gini (que mide la desigualdad dentro de un país) del país regresó al nivel en el que estaba en 2020», subrayó. EFE
