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El traslado anual y temporal de las trabajadoras marroquíes a los campos de la Península Ibérica para ayudar a salvar las cosechas es una gran muestra de cómo debe ser una buena cooperación entre ambos Reinos. En plena crisis diplomática las autoridades marroquíes y española lograron garantizar un traslado fluido de las temporeras marroquíes a España desde el mes de enero de 2022.
Después de la reconciliación total entre ambos Reinos desde el pasado 7 de abril, con motivo de la visita del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, a Marruecos y su apoyo al Plan de Autonomía para el Sáhara planteado por Marruecos desde 2007, el traslado de estas temporeras es mucho más fluido.
Llegada la temporada de cosecha de los frutos rojos a su fin, unas 650 temporeras marroquíes de las 11.100 llegadas con contrato en origen para la campaña de la fresa y los frutos rojos de la provincia han regresado ya a Marruecos dentro del operativo de retorno que comenzó la pasada semana y que concluirá a finales de junio, cuando tan solo se encontrarán en Huelva las que han firmado prórroga o van a concatenar otros trabajos en el sector agrícola.
Así lo han indicado a Europa Press desde la Subdelegación del Gobierno en Huelva, que ha señalado que a partir de la próxima semana se realizarán cuatro viajes de regreso por semana –en los que irán regresando unas 800 mujeres–, de forma que el número de salidas irá aumentando desde la segunda quincena de junio, cuando se de por finalizada la recogida en las fincas freseras.
Por su parte, desde Interfresa han señalado que al no haber ya restricciones de entrada a Marruecos, y al haber barcos todos los días hacia el país Alauita, las trabajadoras «se irán yendo conforme vayan terminando su trabajo», así como han puntualizado que las que se han marchado hasta ahora han sido mujeres «con especial necesidad», según la misma fuente.
