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La historia ha demostrado más de una vez que el sendero de la paz es la mejor arma para mantener la seguridad, la estabilidad y la buena cooperación entre España y Marruecos. La guerra y la crisis no benefician a nadie. Ambos reinos están llamados a explorar los varios tipos de colchones de intereses para evitar las crisis cíclicas.
Así lo ha dejado muy claro Lorenzo Silva, escritor y novelista español, hoy en una entrevista concedida al diario El País con motivo de la publicación de su nueva novela “Nadie por delante” (Destino).
Este autor madrileño (56 años) es un gran admirador de Marruecos y su cultura que descubrió hace dos décadas y su “vinculación familiar han hecho que Marruecos ocupe un espacio personal y literario en su carrera”. El autor cree que “España ha construido buena parte de Marruecos”.
Silva ha realizado en su obra “Siete ciudades en África” publicada en 2013 sobre Marruecos una “minuciosa investigación sobre las ciudades de Ceuta y Melilla, Larache, Tetuán, Xauen, Nador y Alhucemas, urbes que vivieron la influencia española y sobre todo andaluza en distintas épocas históricas, en especial durante el Protectorado español de principios de siglo XX, y construyeron su urbanismo a partir de «la colaboración entre las dos culturas», según El País.
Silva no quiso mojarse mucho sobre la actualidad hispano-marroquí, pero rechazó implícitamente la instrumentalización de la nueva etapa diplomática entre Marruecos y España por algunos círculos políticos. Silva llama a no seguir los pasos de los belicosos como el expresidente del Gobierno español, José María Aznar, quien estuvo a punto de provocar una guerra entre ambos reinos.
“Hemos vivido muy en la inopia feliz y la ciberseguridad hay que trabajarla un poquito (ríe). Pero la seguridad frente a un vecino es más compleja que un sistema de armas. Con un vecino como Marruecos la seguridad viene de la comunidad de intereses y de la disuasión. Hay belicosos que creen que es cuestión de dar puñetazos en la mesa como Aznar. Pero la paz se mantiene más por comunidades de intereses”, sentenció Silva.