Rue20 Español/ Mohammedia
Marruecos y España están ultimando los flecos de la reapertura gradual de las fronteras terrestres de las dos ciudades ocupadas de Ceuta y Melilla a la espera del anuncio de una fecha determinada.
Tras 25 meses del cierre total de las fronteras terrestres, desde marzo de 2020, y 10 meses de crisis diplomática, ambos Reinos están decididos a reanudar pronto y progresivamente la circulación de personas y mercancías en las fronteras, pero puede que haya algunos puntitos de discrepancia sobre la circulación de las mercancías, según algunas fuentes españolas.
El Gobierno español aboga por la reactivación del puesto aduanero de Melilla y la creación de otro puesto aduanero en Ceuta. Hasta el momento Marruecos no ha expresado públicamente su rechazo a esta condición española. Fuentes españolas creen que la instalación de una Aduana en Ceuta equivale al reconocimiento implícito de la soberanía española sobre las dos ciudades.
Sin embargo, los puestos aduaneros permitirán a Marruecos sacar algún beneficio de la circulación de mercancías. La economía marroquí, con un porteo sin un puesto aduanero en Ceuta, perdía mucho hasta octubre de 2019 cuando Rabat suspendió el porteo.
Ante esta situación, el Gobierno español optó por la prórroga del cierre de las fronteras terrestres solo unos 15 días en vez de un mes, según afirma el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicado hoy sábado por el Ministerio de Interior español.
la orden de prórroga al que ha tenido Rue20 Español acceso, subrayó: «Los efectos de la Orden INT/657/2020 finalizan el 30 de abril de 2022, por lo que, al no haber variado la Recomendación del Consejo, procede prorrogar sus efectos. En esta ocasión, el periodo de prórroga será de sólo 15 días, mientras se terminan de definir las condiciones de reapertura ordenada y progresiva de los puestos terrestres habilitados para la entrada y la salida de España a través de las ciudades de Ceuta y Melilla, sin perjuicio de la posibilidad de modificar cualquiera de los artículos, antes de ese plazo, si las circunstancias variasen».
Esta orden surtirá efectos desde el momento de su publicación en el «Boletín Oficial del Estado» hasta «las 24:00 horas del 15 de mayo de 2022, sin perjuicio de su eventual modificación para responder a un cambio de circunstancias o a nuevas recomendaciones en el ámbito de la Unión Europea».
La orden firmada por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska Gómez, tiene dos lecturas:
La primera: los dos países están en el buen camino para materializar la reanudación de la circulación de personas y mercancías pronto y progresivamente. Parece que quedan algunos flecos que se abordarán la semana próxima en Rabat.
La segunda: a pesar de la buena sintonía actual tras la reconciliación, ambos países siguen manteniendo algunas «profundas discrepancias» desde hace semanas sobre las condiciones de esa reapertura, según han revelado fuentes diplomáticas al diario La Voz de Galicia.
La nueva hoja ruta hispano-marroquí, tal como ha sido explicada últimamente por los responsables españoles, tiene la reanudación de la circulación de personas y mercancías en las fronteras de Melilla y Ceuta como un prioridad, y no sólo como objetivo.
Una vez zanjado el dossier de la reapertura marítima, ambos Reinos ya han empezado a mover ficha con discrección para encaminar la reapertura terrestre. Las reuniones de la semana próxima en Rabat podrán ser decisivas.