Rue20 Español/ Mohammadia
Las líneas generales de la política exterior europea se dibujan, en general, entre Francia y Alemania. Los demás miembros de la UE no tienen mucha influencia en la política exterior.
Después de la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea, París y Berlín son los nuevos focos de un viejo mundo que ya no pinta nada en el planeta a nivel geopolítico y geoestratégico.
España influye ahora, sin tener la última palabra, en la UE gracias al cargo de su exministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, quien ocupa el cargo del alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores.
Los tres países más influyentes hoy en la política exterior europea, Francia, Alemania y España, han expresado claramente su apoyo a la Iniciativa de Autonomía planteada por Marruecos para el Sáhara desde el año 2007. Hoy la UE ha vuelto a confirmar su respeto y apoyo a la decisión española de reconocer la soberanía marroquí sobre el Sahara.
Bruselas no ha seguido todavía la nueva dinámica positiva acerca del Conflicto del Sáhara, pero tampoco la ha rechazado. Y todos los caminos conducen a que la UE siga los pasos de EEUU, Alemania, Francia y España.
Josep Borrell, rechazó tajantemente que la nueva decisión del Gobierno español sobre el Sáhara contravenga las disposiciones de las Naciones Unidas.
«España no va a ir en contra de una resolución de las Naciones Unidas. La Unión Europea tampoco», aseguró Borrell en una entrevista con Efe en el marco del Foro de Doha, antes de partir a Kuwait este domingo para mantener reuniones con las autoridades de ese país.
La posición de la UE hacia el Sáhara «no ha cambiado. Nosotros seguimos diciendo lo mismo, es decir, que el conflicto tiene que tener una solución en el marco de las resoluciones de las Naciones Unidas», explicó Borrell.
«Apoyamos al enviado especial de las Naciones Unidas (para el Sáhara Occidental, Staffan) De Mistura, y esta solución debe encontrarse en el marco de un acuerdo entre las partes», agregó.
Borrell reconoció que España prefiere la propuesta de Marruecos basada en la Autonomía como solución.
Borrell no habla en nombre del Gobierno español, pero, de una manera u otra, es un ‘embajador’ de Madrid en Bruselas. Y sus palabras son muy importantes.
Borrell dijo que pese a no ser él «portavoz» del Gobierno español sobre este tema, ha oído al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, «explicarla en el Parlamento muy claramente diciendo que la posición española también sigue estando en el marco de las Naciones Unidas, que el Gobierno español ha expresado su preferencia por una de las posibles soluciones, pero esa solución tenía que seguirse encontrando en el marco de un acuerdo entre las partes».
