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Ismail El Khouaja
Marruecos y China inauguraron ayer una nueva etapa de relaciones económicas al firmar el Convenio del Plan de Implementación Conjunta de la Franja y la Ruta, una iniciativa lanzada en 2013 por el presidente Xi Jinping bajo el nombre de «Un cinturón, una ruta», cuya esencia es la búsqueda, desarrollo y promoción de un nuevo modelo de cooperación internacional.
Esta estratégica firma viene en un momento donde varios países apuestan por Marruecos como puerta de entrada al continente africano. China es consciente de la posición estratégica del Reino, así como de la estabilidad política y el ambiente idóneo que ofrece Marruecos a los inversores, en medio de una región turbulenta.
Por su parte, Marruecos se beneficiara de esta firma a través de la adquisición de nuevos inversores chinos, así como sacar provecho de la presencia china en el lanzamiento de varios megaproyectos como completar las líneas de alta de velocidad que unen Casablanca, Marrakech y Agadir, según informan fuentes bien informadas a nuestro diario Rue20.
“El Reino tiene previsto beneficiarse de la financiación china, y Beijing trata de aumentar las exportaciones a países de todo el mundo y, por lo tanto, invierte en infraestructura y transporte como parte de un proyecto de desarrollo socioeconómico”, dice la Agencia Federal de noticias rusa, фАН.
Según la agencia rusa, las relaciones comerciales entre Marruecos y la RPC no paran de crecerse de manera que en los cinco últimos años han aumentado un 50%, pasando de unos 4.000 millones de dólares en 2016 a 6.000 millones de dólares en 2021.
Cabe destacar que hay más de 80 empresas conjuntas con la República Popular China, según el Ministerio de Relaciones Exteriores del Reino. El Ministerio de Energía para la Transición y el Desarrollo Sostenible de Marruecos había anunciado anteriormente planes para aumentar la proporción de la generación de electricidad no contaminante al 80% para 2050.
Es de recordar que la iniciativa «Un cinturón, una ruta» es un conjunto de enlaces marítimos y ferrocarriles entre China y los países adherentes (140 hasta el momento), entre los que Marruecos fue el primer país de África en sumarse a dicha estratégica iniciativa.
