Rue20 Español/ Rabat
Marruecos representa desde hace varios siglos un modelo singular de convivencia y de convergencia de civilizaciones, culturas y religiones, afirmó la embajadora del Reino ante la Santa Sede, Rajae Naji Mekkaoui.
»Portavoz de un Islam tolerante y moderado a lo largo de su historia hasta nuestros días, Marruecos ha sido siempre una tierra de convivencia, tolerancia e interacción entre los musulmanes y los seguidores de otras religiones», subrayó la diplomática marroquí en una entrevista a la revista italiana Ex partibus, publicada el miércoles.
La embajadora se congratuló de la singularidad del modelo religioso marroquí, basado en la Comandancia de los Creyentes, que pretende ser un factor de unidad y garante del respeto de los principios y valores del islam en Marruecos, destacando los esfuerzos de SM el Rey Mohammed VI, Comendador de los creyentes, en materia de promoción de los valores de la tolerancia y del diálogo interreligioso e intercultural.
Este modelo de interacción y convivencia entre musulmanes, cristianos y judíos ha ayudado a Marruecos a preservar sus orígenes multiculturales, señaló Naji Mekkaoui, señalando que todos estos afluentes han sido reconocidos por la Constitución de 2011, que ha permitido al Reino reforzar su diversidad, su unidad, su identidad y su cosmopolitismo.
Como depositarios de un legado que hunde sus raíces en el África subsahariana, así como en la Europa de Andalucía, los marroquíes comparten orgullosamente a diario este patrimonio como un activo para el futuro de su país, saludó.
Durante el reinado de la dinastía alauita, el espíritu de apertura, fraternidad, tolerancia y paz siempre se cultivó en Marruecos, sostuvo la embajadora. Map