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Ismail El Khouaja
En el mundo actual, el aislamiento es lo peor que puede pasar a un país. Cada Estado está obligado a trabar alianzas. Sin embargo, hay alianzas y alianzas. Unas alianzas que duran mucho pero sin conseguir los frutos deseados, sobre todo cuando se trata de un país y su ex colonia. Otras, en cambio, se caracterizan por la pragmática y el principio ganador-ganador.
El segundo tipo se aplica a Marruecos y de su nueva alianza con Israel que en apenas un año se han hecho muchos avances estratégicos que el país magrebí no ha conseguido con sus socios tradicionales desde su independencia, o sea, en poco tiempo, grandes cosas.
Desde la histórica visita del ministro de Exteriores israelí, Yair Lapid, en agosto pasado, los dos países han firmado varios acuerdos diplomáticos, comerciales y culturales que dieron un impulso a las relaciones bilaterales.
Sin embargo, son los acuerdos militares que más desataron la ira de los vecinos de Marruecos que todavía siguen en estado de shock, ante su continuo armamento que se reforzó más con la visita del ministro de Defensa israelí, Benny Gantz, durante la cual se firmó un acuerdo militar sin precedentes entre los dos países.
Los acuerdos también se extendieron al ámbito cibernético. Marruecos está sacando ventaja de estos acuerdos que le permitirán ser líder a nivel continental en este ámbito, dado la vanguardista posición de Israel en esta materia.
En este sentido, el Estado hebreo hará una formación de alto nivel a 5000 ingenieros marroquíes, en el marco de la cooperación en todos los niveles que los dos países mantienen desde la reanudación de sus relaciones diplomáticas en diciembre pasado gracias a los Acuerdos Abraham mediados por Estados Unidos.
«Israel, que es líder en la zona Mena en cuanto a la producción de tecnologías avanzadas, se encarga de la formación de 5000 ingenieros marroquíes en ámbitos que las dos partes mantendrán en secreto por cuestiones soberanas, estratégicas y de ciberseguridad de larga data», dice una página de Twitter especializada en las relaciones israelo-marroquíes.
Asimismo, la Asociación Mimouna –una organización de jóvenes líderes musulmanes marroquíes– y el Comité Judío Estadounidense (AJC) lanzaron esta semana un programa conjunto de becas judío-marroquí (Beca de Líderes Emergentes AJC – Mimouna Michael Sachs), según «The Jerusalem Post».
Todas estas iniciativas tienen como objetivo profundizar el entendimiento y fomentar la cooperación entre los marroquíes e israelíes, dos pueblos que compartieron una historia arraigada en la memoria de los dos países que ahora están colaborando para establecer la paz en la región, ante las hostilidades de los vecinos de Marruecos.
Es de destacar que Marruecos e Israel celebraron este jueves en Washington el primer aniversario del acuerdo de la normalización de relaciones entre ambos países.
