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Meryem Ghoua
Hace 33 siglos, el pueblo amazigh empezó a plasmar y redactar su historia en el mundo entero; dicha historia, hace tiempo estuvo totalmente desconocida, o mejor dicho, oculta, y a veces ocultada.
«Las relaciones más numerosas y las más fructíferas de la Berbería las tenía con Italia y España», declaró el arqueólogo y historiador francés StephaneGsell.
La cultura amazigh contribuyó inmensamente en forjar culturas como la fenicia, la griega o la romana, sin embargo, la cultura amazigh era ignorada.
La primera oleada de los beréberes se produjo desde la expedición de la conquista y probablemente fue la más numerosa.
Hace 614 años, exactamente el 22 de septiembre de 1609, entraba en vigor en España el decreto de expulsión de los moriscos.
Hoy en día, todavía existe un conflicto sobre el origen de una gran cantidad de topónimos bereberes.
De hecho, en España aún existen tribus que llevan nombres de imazighen y de personajes famosos que dejaron sus improntas en el territorio español, como por ejemplo, San Cebrián de Mazote ( en homenaje al potentado amazigh Massud) y Megueces, tribu de la rama de los Masmuda.
Las huellas de esta larga presencia permanece brillando de mil maneras en el suelo íbero, incluso en los topónimos y en el vocabulario.
Según el diario Palestino, los bereberes han sido actores y pioneros mudos en la instalación árabe en España.
Por otro lado, la influencia del dialecto árabe en el idioma español, precisamente en el nivel léxico, ha sido muy significativa, debido a la presencia arabófona en la península ibérica que duró desde el año 711 hasta 1613.
Asimismo, entre 1609 y 1613 tuvo lugar la expulsión de los moriscos, muchos de los cuales hablaban árabe.
Se trata de los antiguos sujetos musulmanes obligados a adoptar el cristianismo desde las medidas de evangelización forzadas, iniciadas en 1499 bajo el impulso del arzobispo Francisco Jiménez de Cisneros.
Lo más atractivo en este tema es que existían otros grupos étnicos en el territorio español pero son los imazighen los que formaron el número más importante en los primeros tiempos de la penetración musulmana en la que desempeñaron un papel determinante.
En este contexto, el jefe de la expedición musulmana que inició la penetración de la península Ibérica, Tarik Ben Ziad, era un guerrero de origen persa o beréber, nombrado gobernador de la plaza de Tánger por su señor, Musa ibn Nusayr, representante del califa en el Magreb.
Por desgracia, Tarik ben Ziad falleció sin reconocimiento por sus conquistas y en una fecha desconocida.
Cabe recordar que imazighen (los beréberes), pertenecen a un pueblo autóctono del Norte de África con identidad y cultura específicas y que la palabra amazigh significa persona libre.