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Ismail El Khouaja
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) quiere vetar el incremento de las importaciones de productos cítricos para no “reventar el mercado”, cuando lo que quiere es para promover el producto nacional que se ve incapaz de competir al producto proveniente depaíses terceros, como Marruecos.
En principio, la COAG tiene derecho a proteger el producto nacional, pero no a costa de lanzar falsas acusaciones respecto a los productos provenientes de países terceros.
Para COAG, todo lo que viene de estos países no cuenta con los criterios sanitarios requeridos. “Nuestras producciones de naranjas, clementinas, limones o pomelos son más sanas y seguras para el consumidor que las importaciones, porque producimos bajo los más altos estándares de calidad”, dice Pedro Gomáriz, responsable del sector citrícola de COAG, citado por el diario agrodigital.
Esta forma de promocionar el producto nacional pone bajo sospecha a las autoridades competentes que dan entrada a productos que, según Gomáriz, amenazan la salud de los europeos.
Asimismo, las declaraciones de Gomáriz menosprecian la consciencia del consumidor europeo a la hora de elegir los productos que considera mejores.
El consumidor europeo está consciente de lo que consume, y estas declaraciones solo ponen el mismo producto nacional bajo sospecha.
El buen producto se impone a sí mismo, sea cual fuere el precio, por lo cual hace falta mejorar el producto nacional para poder competir con los productos de países terceros.
Cabe destacar que Marruecos es el cuarto proveedor de productos cítricos con (139.265 tn) a la Unión Europea, que siempre apoya y rechaza las acusaciones del sector agrícola español en su batalla de tergiversar el producto marroquí.
