Rue20 Español/Rabat
El Fiscal General del Rey ante el Tribunal de Apelación de Guelmim anunció, hoy viernes, que el caso del fallecimiento de Abdelouahab Belfquih por una herida de bala en su domicilio ha sido cerrado, ya que el incidente no está relacionado con un acto criminal.
Para esclarecer a la opinión pública, el Fiscal General del Rey indicó en un comunicado que los resultados de la investigación ordenada para aclarar las circunstancias de este caso, en la que se entrevistó a los miembros de la familia del fallecido así como a sus empleados domésticos, además de la autopsia realizada y de la pericia balística efectuada sobre el arma incautada en el lugar de los hechos, y de la pericia genética sobre las muestras tomadas en el lugar de los hechos, concluyeron que el fallecido había entrado en su domicilio alrededor de las 02h30 del 21 de septiembre y que se quedó encerrado en su habitación sin abandonarla. Inmediatamente después de oír un disparo, los miembros de la familia entraron en la habitación, donde encontraron al difunto tumbado de espaldas, con la sangre manando de su vientre y una escopeta a su lado.
Tras recordar que la investigación se inició a raíz del comunicado del Ministerio Público publicado el 21 de septiembre sobre este incidente, la misma fuente subrayó que los resultados de la investigación también concluyeron que los miembros de su familia confirmaron que el difunto seguía vivo en el momento en que entraron en su habitación y que les pidió que no lo trasladaran al hospital, señalando que los guardias de la casa no notaron ningún movimiento inusual el día anterior al incidente y que ninguna persona extranjera entró en la casa.
El informe de la autopsia practicada por el médico forense mostró que la muerte se debió a un disparo con la ausencia de restos externos de metralla del disparo alrededor de la herida, explicó la misma fuente, subrayando que el peritaje balístico realizado por el Instituto de Ciencias Forenses ha demostrado que el disparo que alcanzó a la víctima procedía de una escopeta que resultó ser suya y que el análisis de las muestras tomadas de sus manos ha demostrado la presencia de partículas de residuos del disparo (Bario, Antimonio y Plomo) con la presencia de rastros de sangre del difunto en la boquilla del arma, lo que confirma que utilizó esta pistola.
El comunicado añadió que el examen genético realizado por el laboratorio de análisis genéticos mostró que el ADN extraído de las muestras encontradas en la culata y la boquilla del fusil, los restos de sangre encontrados en el lugar del incidente y la ropa del difunto, así como en la herida de bala son idénticos a la huella genética del difunto.
Tras el examen de los resultados de la investigación y de los peritajes realizados al respecto, que concluyeron que el difunto se había suicidado con un disparo, se decidió cerrar el caso por el hecho de que la muerte no fue vinculada a un acto criminal, concluye el comunicado. MAP