Rue 20 español/Rabat
En conjunción con el resurgimiento de la polémica sobre la intención del próximo gobierno de levantar los subsidios al gas butano y al azúcar, algunas fuerzas políticas han advertido sobre los efectos sociales negativos que se derivarán del levantamiento de los subsidios, incluyendo en particular el impacto de esta decisión en el poder adquisitivo de los ciudadanos.
El Partido Vanguardia (Oposición) advirtió que la intención del Estado de levantar definitivamente los subsidios al gas butano y al azúcar pudiera provocar «explosiones sociales».
En un comunicado emitido por su Asamblea Nacional, ese partido izquierdista advirtió de un «inevitable deterioro en las condiciones de vida de los ciudadanos como resultado de la insistencia en implementar las mismas opciones antidemocráticas e impopulares», según un comunicado.
De hecho, el levantamiento del subsidio al gas butano conducirá inevitablemente a un aumento de su precio, ya que pasará de 42 dirhams (Para una Bombona) a 80 dirhams, es decir el doble del precio actual.
La sensibilidad del tema se refleja en su estrecha vinculación con la paz social. El actual gobierno ha pospuesto la liberación de los precios del gas butano y del azúcar por temor a las protestas sociales. Este problema se dejó al próximo nuevo gobierno.
El gobierno de Benkirane (2011-2016) recurrió a la liberaación de los hidrocarburos, lo que provocó una subida de precios, que resultó el descontento de grandes grupos de ciudadanos que se vieron afectados por esta medida.
En 2018, Saad Eddin El Othmani, jefe de gobierno, confirmó ante la Cámara de Consejeros que la política social del gobierno tiene como objetivo apoyar el poder adquisitivo de los ciudadanos.
Si bien reconoció la voluntad del gobierno de liberar los precios de todos los productos básicos de consumo, enfatizó que esto no sucederá hasta después de proporcionar el terreno apropiado que permitirá al gobierno dirigir los programas sociales a los pobres y grupos vulnerables.