Rue20 en español / Mequínez
Mohamed Charbi
Estos días el espionaje ha vuelto a ser un tema de actualidad. Muchos medios de comunicación internacionales han abordado y siguen abordando este asunto desde diferentes perspectivas.
Varias voces mediáticas han dicho, sin ningún argumento válido, que Marruecos ha llevado a cabo un presunto espionaje al presidente francés, Emmanuel Macron, a través de un programa israelí llamado Pegasus.
Los objetivos que se esconden detrás de esta mentira mediática inventada por los enemigos de Marruecos son más claros que el agua, entre ellos se puede mencionar los siguientes:
Intentar debilitar a Marruecos que está consiguiendo éxito tras éxito, sobre todo durante los últimos años. A saber, el caso Pegasus es un ataque contra Marruecos por sus éxitos y logros.
Querer distorsionar y deformar la brillante imagen de Marruecos ante el espejo del público mundial.
Buscar ralentizar y parar el boom diplomático continuo del Reino de Marruecos que está sorprendiendo cada día más a las grandes potencias del planeta.
Sin embargo, resulta muy difícil ocultar el sol del Marruecos de hoy con el dedo de la mentira y la conspiración. No podrán nunca jamás conseguir sus metas venenosas.
Con la mentira nunca se puede lograr grandes cosas. Además, al final las mentiras se descubren con facilidad y rapidez, o sea, ninguna mentira se oculta para siempre. Más rápido se coge al mentiroso que al cojo.
No cabe la menor duda de que lo que está ocurriendo es una verdadera, auténtica y flagrante conspiración contra los intereses de Marruecos.
Los medios de comunicación que han difundido adrede estas falsas noticias saben muy bien lo que quieren, y lo han hecho con malas intenciones.
Estos medios no han podido tragar o aceptar la realidad de un Marruecos que está triunfando, fortaleciéndose y consolidando su soberanía a todos los niveles.
Probablemente, están animados y empujados por grandes personalidades o países. Están perdiendo tiempo y esfuerzo en vano, porque al fin y al cabo van a salir con las manos vacías.
Por mucho que intenten dañar la imagen de Marruecos, no podrán hacerlo, ya que no pueden con Marruecos. Nunca podrán llegar ni a la suela de los zapatos del Reino marroquí.
A su vez, el ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Naser Burita, ha tomado cartas en el asunto demostrando que las acusaciones del supuesto espionaje responden a una hostilidad a Marruecos por sus éxitos, y buscan en realidad un sabotaje a gran escala contra el país.
Por lo demás, los 17 títulos que forman el consorcio mediático Forbidden Stories «sirven a agendas bien conocidas por su principal hostilidad hacia Marruecos, y están carcomidos por los éxitos del país bajo el liderazgo de Su Majestad el Rey Mohamed VI», según las palabras del ministro de Asuntos Exteriores de Marruecos.
Cabe recordar también que las acusaciones a Marruecos de utilizar el programa Pegasus no son nuevas, es decir, se repiten cada dos por tres. La Amnistía Internacional ya publicó en 2020 un informe donde aseguraba que algunos notorios disidentes marroquíes habían sido víctimas de infiltración telefónica.
En pocas palabras, digan lo que digan, Marruecos seguirá dando pasos gigantescos y firmes hacia el crecimiento y el desarrollo en todos los niveles (a nivel económico, diplomático, social, etc.) y nadie podrá parar o interrumpir este avance marroquí.
