RUE20 ESPAÑOL / MADRID
El juez Santiago Pedraz de la Audiencia Nacional ha interrogado esta mañana al presunto líder del Frente Polisario, Brahim Gali, quien ha declarado vía videoconferencia desde el Hospital San Pedro de Logroño donde está hospitalizado por COVID -19 hace más de un mes.
Tras la comparecencia, el juez “ no ha decretado la presión provincial ni otro tipo de medida cautelar personal contra Gali”, dice el tribunal de la Audiencia Nacional. Pero se le pidió a través su defensa que aporte un domicilio y teléfono de España a fin de estar localizado.
La pasividad de la justicia
Maria José Malagón, abogada del víctimas Fadel Berika, ha criticado la actitud de la justicia español al no tomar medidas cauteles para impedir la salida de Gali de España.
La abogada ha explicado, en una declaración a la medíos del comunicación tras la comparecencia por videoconferencia, que Gali rechazó responder a las preguntas de la defensa de las víctimas, en cambio respondió a las preguntas de su defensa y del ministerio público.
La abogado afirmó que a lo largo de la comparecencia no se ha podido ver claramente a Brahim Gali, tampoco se ha podido identificar su rostro, por la persona comparecida llevaba la mascarilla. “ no ha respondido a ninguna de mis preguntas solo a respondido a las preguntas de su defensa y la fiscalía”, dice la abogada.
“ está muy bien que lo diga por que es su defensa. Eso es obvio”, comenta la abogada la negación de las acusaciones por parte de los abogados de Gali.
Añade: “ si Gali comparece hoy es porque hay algún indicio. No creo que hay algun juzgado que, y mucho menos este juzgado, que esté dando riendas suelta a una instrucción en que considera que no ha indicios”.
“ he pedido la presión preventiva, pero se me ha negado”, asegura la abogada, afirmando que el la Fiscalía no ha pedido ninguna medida cautelar contra Gali. “ no se ha tomado ninguna medida cautelar”, según dijo la abogada al ser preguntada por las medidas dictadas por el juez tras la comparecencia.
La abogada considera la actitud pasiva tanto del juez de instrucción como del ministerio público español como una complicidad con el acusado Gali, ya que las víctimas temen una posible salida de Gali hacia Argelia tras sus comparecencia.
“ temo la huída de Gali, por que no es la primera vez que pido medidas cautelares. A mí me duele que esto puede ser una fuga”, aclara la abogada.
Por que el ministerio fiscal ha dicho que entiende que los indicios no están claros, tampoco hay una necesitada enorme”.
“Me cliente es una persona que ha sido torturado terriblemente y por eso ha puesto una querella”, argumenta la abogada rechazado las acusaciones de la defensa de Gali al hablar de la politización del caso.
Cabe recordar que ésta es la primera vez que un juez logra hacer declarar a Gali, quien ha sido interrogado en el marco de dos querellas, además de otros querellados por presuntos delitos, sobre todo, de lesa humanidad, genocidio y tortura.
El presunto líder del Frente Polisario será declarado primero por la querella presentada por Fadel Mihdi Breica, activista de ascendencia saharaui, quien denuncia torturas que había sufrido en los campamentos de Tinduf (Argelia) en 2019 por parte de militares del Polisario.
También Gali ha sido interrogado por la querella de la impulsada en 2008 por la Asociación para la Defensa de los Derechos Humanos (Asadeh) para investigar el trato inhumano a los «prisioneros de guerra» de Tinduf y ciudadanos saharauis, sobre todo personas de nacionalidad española, cometidos por militares del Frente Polisario. Esta organización acusa de «retener contra su voluntad a miles de saharauis (…) con la complicidad de las autoridades de Argel», según EFE.
