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La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) avisa de las consecuencias del envenenamiento de las relaciones diplomáticas entre Marruecos y España, sobre todo, en la protección de los derechos de los inmigrantes en las fronteras de Ceuta.
En un informe publicado hoy OÍMOS reconoce indirectamente el rol primordial de Marruecos en la lucha contra las redes de inmigración.
“ La OIM reconoce la colaboración de larga duración entre España y Marruecos y sus esfuerzos mutuos para el mejoramiento de la gobernanza migratoria y alienta mayores esfuerzos en este sentido”, afirma el informe.
también la OIM Señala que desde el comienzo de 2021, habían llegado cerca de 26.400 personas a la Unión Europea a través de las Rutas del Mar Mediterráneo.
Si bien las cifras han aumentado en comparación con el mismo período del año pasado, la OIM cree que las llegadas pueden ser gestionadas a través de una mejor gobernanza en el sector de la migración, el cual debe incluir el ofrecimiento de más medios de migración seguros y el mejoramiento de los mecanismos de solidaridad entre los Estados Miembros de la UE, tal como ha sido establecido en el Pacto sobre Asilo y Migración que se está debatiendo actualmente.
Los datos citados demuestran el gran esfuerzo de las autoridades marroquíes en la lucha contra la inmigración y las redes de tráfico de personas, pero al mismo tiempo Marruecos no podría ejercer de gendarme de España y Europa.
La organización internacional anuncia la llegada de unos 9.000 inmigrantes a la ciudad ocupada Ceuta, entre el lunes 17 y el miércoles 19 de mayo.
Añade que entre las personas que cruzaron hacia Ceuta se encontraban 1.500 menores con edades entre 7 y 15 años.
Si bien muchos ya han sido devueltos a través del mecanismo de agrupación familiar y la asistencia de seguimiento, unos 800 menores siguen alojados en un depósito en Ceuta.
La Organización alienta los esfuerzos actuales para brindar asistencia a menores y sostiene que los principios que rigen la identificación de las soluciones que se les brinden deben ser los intereses de dichos niños y su protección.
La OIM está dispuesta y pronta a apoyar a las autoridades españolas a fin de brindar a los menores la asistencia especial que tanto necesitan, ello en coordinación con asociados que se encuentran en terreno
“Nuestra respuesta debe dar prioridad a la seguridad de las personas y garantizar el acceso a la protección y a otras formas de asistencia, con independencia de las razones que los forzaron a irse”, dijo el Director General de la OIM António Vitorino
“Para que la gestión de la migración y la respuesta a las necesidades de las personas en movimiento sean efectivas, deberá fomentarse la colaboración y el diálogo entre los países de acogida, de tránsito y de origen”.
